Carlos Sainz no ha conseguido pasar a la Q3. Durante su vuelta definitiva, una bandera amarilla ha sido provocada por la salida de pista de un Haas. Sainz asegura estar «cabreado». Otra sesión en la que el madrileño tiene mala suerte y no pudo demostrar los tiempos que venía haciendo en las sesiones anteriores.
«Nada, veníamos toda la clasificación haciendo 1’41»9, 1’42»0, que nos hubiese hecho pasar fácil a la Q3. La vuelta rápida del neumático era la tercera. Hemos hecho una vuelta de preparación y en la última vuelta, antes de pasar por la bandera a cuadros, iba detrás de un Haas y ya sabemos qué pasa cuando vas detrás de un Haas, que puedes tener una bandera amarilla», ha comentado Sainz en declaraciones a Movistar+ F1.
«El cabreo que tengo es grande porque otra vez nos pasa algo fuera de nuestro control y empieza a ser un poco cansino que los errores de los demás te acaben afectando. Esta bandera amarilla en un circuito como Bakú, donde es importante clasificar bien, es una faena».
Sainz explica lo que ha ocurrido
«Se ha ido recto en la Curva 2 y ya está. Bandera amarilla, tienes que abortar la vuelta y no puedes hacer una buena vuelta en toda la clasificación«, ha agregado.
«Hay que tener en cuenta que mañana saldré décimo por la penalización de Giovinazzi… Mañana estaré más contento, imagino, pero hoy no me apetece pensar en mañana», ha añadido para terminar.
Finalmente el piloto madrileño, aunque ha clasificado undécimo, saldrá desde la décima posición por la sanción que tiene Giovinazzi. Mañana en la carrera tiene posibilidades de adelantar. Habrá que esperar hasta mañana para ver dónde puede llegar el piloto madrileño de McLaren. Puede que hoy no le apetezca pensar en mañana pero mañana puede agradecer salir décimo en una pista en la que la acción no falta.
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