Sebastian Vettel no ha comenzado nada bien la temporada 2019. El piloto alemán ya tiene una desventaja de 31 puntos con el líder del campeonato del mundo, Lewis Hamilton, y comienza a ver difícil ganar este año el título. Tanto Vettel como Ferrari se han llevado un golpe muy duro en estas tres primeras carreras, al ver a su máximo rival, Mercedes, lograr tres dobletes. Los italianos necesitan reaccionar antes de que sea demasiado tarde.
El campeón del mundo de la temporada 2016 y ex piloto de Mercedes, Nico Rosberg, declaró que Ferrari está comprometiendo demasiado el rendimiento en las curvas en la búsqueda de velocidad punta. Sebastian Vettel también ha hecho declaraciones tras no sentirse cómodo con el coche en el pasado Gran Premio de China, el alemán dijo que Ferrari debe decidir rápidamente qué quiere hacer con su SF90.
Vettel está contento con el Ferrari, pero reconoce la importancia de estos próximos Grandes Premios: “Tenemos un monoplaza muy bueno, no tiene nada de malo, pero creo que aún no podemos ponerlo en la ventana correcta. Estas semanas y las próximas serán muy importantes para que entendamos a dónde debemos ir en los próximos meses”
El alemán piensa que serán capaces de solucionar sus problemas muy pronto: “No estoy del todo contento aún en comparación con el punto de partida. Obviamente, en los tres circuitos en los que hemos estado son bastante diferentes. Las condiciones que teníamos son diferentes. Pero creo que empezamos a ver una especie de patrón y, en particular, a lo largo de una distancia de gran premio, a entender lo que necesitamos, lo que necesito, para desbloquear realmente este coche”.
El jefe de equipo de Ferrari, Mattia Binotto, cree que la diferencia entre Mercedes y Ferrari será muy distinta en cada circuito. En Australia el equipo Mercedes dominó de forma clara y contundente mientras que en Baréin fue Ferrari quién les devolvió la moneda antes de que su carrera se arruinara por el error de Vettel y el fallo de motor de Leclerc.
Binotto afirma que lo de Melbourne fue algo que no volverá a ocurrir en todo el año: “Australia creo que fue una excepción, donde la diferencia fue muy, muy grande. De otro modo, creo que entre Barcelona (en los test de pretemporada) Bahrein y China, la diferencia fue de unas pocas décimas”.
El líder de Ferrari conoce los límites: “Eso es lo que esperas entre dos coches que son muy fuertes y muy similares en algunos aspectos. Sabemos dónde están los límites de nuestro monoplaza, y estas limitaciones pueden enfatizarse en algunos circuitos en comparación con otros. La clave será desarrollar el coche de tal manera que lo hagamos aún más fuerte en el futuro”.
Estos próximos Grandes Premios serán muy importantes para Ferrari. Los italianos necesitan cuanto antes una victoria que les permita meterse de nuevo en la lucha por ambos campeonatos. Los de Binotto no ganan desde el Gran Premio de los Estados Unidos del año pasado, donde Kimi Raikkonen se subió a lo más alto del podio tras ganar una épica carrera.
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