Fernando Alonso ha conseguido terminar la cuarta etapa, la cual ha descrito de “dura mentalmente”. Ha cruzado a 26 minutos de Stéphane Peterhansel y sabe lo mucho que le queda por aprender.
El asturiano empezó diciendo: “Ha habido de todo, fue una etapa muy difícil y larga. Salimos a las 7:45 y son las 19:00 ahora, así que son diez horas en el coche”, en declaraciones que recoge Motorsport.com. “Bien en cuanto a sensaciones, pero hemos perdido un poco de tiempo al principio, cuando dejamos pasar a Nasser y a Yazeed, que venían detrás de nosotros”.
“Luego tuvimos un pinchazo, nos metimos detrás de Peterhansel también, estuvimos un poco con el pie cambiado desde el principio hoy”. Asegura que a 150 kilómetros del final se quedó sin repuesto y de ahí el ritmo más lento.
Algo frustrado por no saber cómo desenvolverse en el terreno visto hoy: “Me falta mucho ritmo. Ayer lo decía, que la parte final por ríos secos, con mucha piedra, no sé a qué velocidad tengo que ir. Hoy la mitad de la etapa era ese terreno. Sabía que me tocaba perder un poco, pero estoy contento de estar aquí y no haber tenido ningún percance mayor”.
No ha tenido problemas graves, pero se ha podido experimentar lo dura que es esta prueba dentro del coche: “La más difícil, sin lugar a duda. Diez horas en el coche, estresante en todos los sentidos desde el comienzo, la navegación, estos ríos secos que están llenos de piedras… a veces había momentos que teníamos que respirar hondo los dos y volver a concentrarnos para seguir, porque estaba siendo una etapa mentalmente súper exigente para todo el mundo”.
Marc Coma también dedicó unas palabras ha dicho medio: “Un día complicado. Hemos pinchado dos veces en los primeros 100 kilómetros. Tras no tener recambio ha sido una supervivencia total. Un día que hemos salvado volviéndonos consistentes y eso es bueno”.
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