Williams ha confirmado que tanto George Russell como Nicholas Latifi tendrán en sus coches una actualización “poderosa” en el Gran Premio de Gran Bretaña. Hasta ahora se han ido alternando esta mejora en sus coches, pero ahora los dos la tendrán disponible.
Williams ha dado un pequeño salto de calidad en este inicio de temporada. Prueba de ello es que Russell se metió en la Q2 en las dos últimas carreras de la temporada. Hasta ahora, el británico y su compañero Latifi se han alternado las actualizaciones, pero ahora confirman que en Silverstone estarán disponibles en ambos monoplazas.
Dave Robson, jefe de rendimiento, destaca que estas ligeras mejoras son la causa de los buenos resultados en clasificación y de que Russell clasificara el pasado domingo por delante del Red Bull de Alex Albon.
“Las mejoras son bastante poderosas, así que probablemente a Nicholas le resulte un poco más difícil encontrarlas que a George”, ha expresado Robson en declaraciones recogidas por Motorsport.com.
Hasta ahora, tal y como ha confirmado el jefe de rendimiento, los dos pilotos se han ido alternando las actualizaciones, aunque por el momento no son capaces de asegurar qué margen de mejora tienen.
“Tuvimos una clasificación sobre mojado en Austria, por lo que es difícil decirlo, pero creo que ambos lo han experimentado por intervalos, están convencidos de que es una clara ventaja. Ambos estarán equipados con él en la próxima carrera en Silverstone, pero no puedo ponerle un número”.
Las mejoras que Williams ha incorporado en este inicio de temporada son tanto mecánicas como aerodinámicas. En el Gran Premio de Austria, Russell y Latifi ya utilizaron distintas configuraciones en el alerón trasero. El piloto canadiense optó por un ala con una alta carga aerodinámica, mientras que la del británico tenía menos carga.
En el Gran Premio de Estiria ambos llevaban un ala en forma de T y ya en Hungría los dos pilotos tenían un ala con una alta carga aerodinámica. En las tres carreras que se han disputado hasta la fecha también han utilizado una suspensión en posición vertical, que se ha ido alternando en los dos coches a lo largo de los tres fines de semana.
Estas actualizaciones tendrán un impacto directo en la conducción, pero también en la gestión de las gomas, en su rendimiento y en su vida útil.
