Una vez más, DragonSpeed cambia de estrategia en cuanto a las categorías de motor se refiere. Abandonan la IndyCar definitivamente, aunque no le cierran la puerta en el futuro, mientras que confirman su regreso al Campeonato de Resistencia para tener una temporada completa.
En cuanto a la Indy, Elton Julian quería participar en la competición y en las 500 Millas, con el sueño cumplido ha decidido vender su chasis a Meyer Shank Racing: “No tengo nada negativo que decir en nuestro paso por IndyCar, pero la COVID ha hecho retroceder al equipo y de ahí la venta. Ahora nos pondremos centrar más en nuestro programa en LMP2 con una nueva fábrica en Barcelona. Puedo decir confiado que si tenemos oportunidad, volveremos”, decía Julian para RACER.com.
Repasando su paso por IndyCar, debutaron en St. Petersbugo en 2019 con el inglés Ben Hanley, para después ir a Barber y disputar las 500 Millas de Indianápolis clasificando en vigesimoséptimo lugar, aunque en carrera tuvieron que abandonar en la vuelta 54 por un fallo mecánico. Este 2020 han vuelto a participar en el IMS acabando vigesimotercero.
La nueva aventura de los estadounidenses será de nuevo en el WEC tras su temporada completa en 2018/2019 tanto en LMP2 como en LMP1. En la segunda categoría consiguieron una victoria en las 6 Horas de Spa con Roberto González, Pastor Maldonado y Anthony Davidson. Sumaron tres podios, pero uno de ellos con Nathanaël Berthon en lugar del británico.
En LMP1 su paso fue peor, su mejor resultado fue un sexto. Por eso mismo, con una nueva reglamentación, DragonSpeed tan solo estará presente en LMP2 con un Oreca 07 Gibson. El único piloto confirmado por el momento es Henrik Hedman, mientras que Elton tiene la seguridad de hacer una alineación competitiva, en una categoría que podría acusar varias salidas debido a la nueva normativa de los Hypercar.
