A estas alturas de temporada muchos equipos están interrumpiendo el desarrollo del coche actual para centrarse en el drástico que cambio que llevará a cabo la Fórmula 1 en 2022. Toto Wolff tiene claro que quien no lo haya hecho ya, le costará recuperar el déficit.
En concreto, Mercedes llevó las últimas actualizaciones al Gran Premio de Gran Bretaña, mientras que sus máximos rivales siguen trabajando duro para llevarse este Mundial, ya que tienen una gran oportunidad antes de la marcha de Honda. Hay otros como Ferrari que ya dejan de lado este 2021 a pesar de su lucha con McLaren, mientras que estos en Hungría han llevado el último paquete. Situaciones parecidas viven Alpine, Aston Martin y AlphaTauri.
Los tres equipos que entraron en 2021 sacrificándolo por completo fueron Haas, Williams y Alfa Romeo. Los estadounidenses llevaron las primeras actualizaciones a Baréin tras los test de pretemporada. En Grove saben que es la oportunidad perfecta para dar el salto al medio campo, aunque están cerca. Los suizos esperan recuperar en nivel que está perdido desde 2018.
Para 2022 el cambio es muy grande. La Fórmula 1 espera que se iguala la parrilla, aunque es inevitable que algún equipo no se quede en la cola. Para evitar todo lo posible que esto suceda, para el jefe de Mercedes es mejor mirar al próximo año. “Hay que mirar también en 2022. Porque a menos que tengas una varita mágica, estarás en déficit el próximo año”, le dijo a Motorsport.com.
“Así que creo que la mayoría de los equipos han detenido el desarrollo para 2021. Pero si continúan presionando para este año, eso ciertamente les dará una ventaja”, decía. Esto es lo que sucede en Red Bull. “Tienes que ir semana a semana, carrera a carrera y creo que el equipo está haciendo un gran trabajo al equilibrar los desafíos de este año y el próximo”, aseguraba Horner.
