La Fórmula 1 ha cambiado sus reglas radicalmente para que los coches puedan seguirse más de cerca, aumente la emoción de las carreras y que todos los equipos tengan las mismas oportunidades.
Andrian Newey, el máximo encargado de diseñar el RB18, ha elogiado algunos aspectos de las nuevas reglas, concretamente de la parte aerodinámica, la cual traerá más adelantamientos, al igual que los límites presupuestarios, que acercarán más a todos. También tiene algunas quejas y es que tiene dudas sobre si estos coches más pesados ayudarán al deporte a avanzar o si plantean una pregunta mayor sobre la sostenibilidad.
“Creo que el principio de tratar de ayudar a los adelantamientos reduciendo la sensibilidad del coche que le sigue al que va delante está… está bien. Creo que ayudará a adelantar un poco. No creo que sea un cambio significativo, pero ayudará un poco. Creo que hay otras formas en que podría haberse hecho, digamos”, comentaba Newey en una entrevista exclusiva para RacingNews365.com.
El gran objetivo es que la parrilla se junte y cualquiera pueda luchar por victorias, pero Newey tiene claro que eso no pasará este 2022. “Lo único que diría es que este es, en realidad, el cambio aerodinámico más grande que hemos tenido desde que se prohibieron los coches Venturi en 1982. Si va a tener un cambio de regulación tan grande, que inevitablemente trae todo tipo de otros cambios, probablemente dividirá la parrilla durante las primeras temporadas”.
Hablando sobre el peso de estos monoplazas, el de Red Bull cree que la Fórmula 1 no está dando los pasos adecuados. “Llevar los coches al límite de peso, para muchos de los equipos, es un gran reto, seguro. Los monoplazas se han vuelto más grandes y pesados y, aerodinámicamente, no particularmente eficientes, con mucha resistencia. Creo que es un poco vergonzoso que la Fórmula 1 haya ido en esa dirección”, concluía.
