Saliendo desde el fondo de la parrilla, Carlos Sainz ha llegado hasta la cuarta posición, pero el objetivo era entrar en el podio. De todos modos, la gran meta es estar de nuevo a la altura Red Bull y el madrileño cree que lo harán.
Sainz no esperaba tener este ritmo con su F1-75 y se mostró sorprendido por haber estado detrás de George Russell tan pronto. “Buenas sensaciones porque me he notado más rápido de lo que esperaba. Íbamos muy rápido y eso me ha permitido ir pasando a un coche por vuelta, prácticamente, perdía poco tiempo. Eso me ha permitido colocarme detrás de Russell, que era el objetivo, pero cuando me he puesto ahí estaba lejos”.
Con los neumáticos blandos, Sainz esperaba coger al británico, al menos, en la última vuelta. Y de ahí, a la aventura. “Lo iba cogiendo mucho en esas últimas vueltas, pero el coche de seguridad lo ha impedido. No ha podido ser, pero hemos ido rápido, hemos hecho buenos adelantamientos. Ha sido divertido”.
“Hubiera llegado pegado en la última vuelta y si me hubiera tirado o no, una incógnita. Íbamos quitándole un segundo por vuelta y eso nos daba en la simulación que llegaba en su cola”, explicaba el piloto de Ferrari.
Max Verstappen ha mostrado, una vez más, un gran ritmo en Monza, por lo que Ferrari no ha ni jugando con la estrategia. “No estamos tan lejos, estamos mucho más cerca. Sin mi penalización hubiéramos tenido a los dos coches para hacer una estrategia mixta. Habríamos puesto a Max en mucha presión y eso daría una nueva oportunidad para las dos. A ver si se acaban estas penalizaciones y el hecho de estar ahí arriba nos permita luchar”.
