La temporada pasada, la IndyCar sufrió algunos choques duros en óvalos. En algunos de ellos, el casco del piloto estuvo cerca de pasar por los laterales del reposacabezas. Es por este motivo que tras la temporada, se marcó como uno de los elementos a revisar su diseño y desarrollo.
En los test de pretemporada realizados en el Thermal Club, Dallara, proveedor oficial de los chasis, y la propia IndyCar, hicieron pruebas de una actualización de este elemento de seguridad.
El encargado de revisar este elemento fue el equipo técnico de la categoría, encabezado por Tino Belli, Bill Prappas, Dallara y el Dr. Terry Trammel. Este grupo estuvo estudiando y revisando los accidentes de la pasada temporada para crear una versión revisada del reposacabezas, con laterales más altos.
Con un prototipo ya creado, este equipo técnico, estuvo en el Thermal Club, probando el nuevo diseño con los pilotos, y recibiendo feedback de ellos. El comentario más repetido fue que la parte delantera del reposacabezas era demasiado alta, molestando a la visibilidad lateral.
El equipo técnico encargado de la revisión de diseño daba sus primeras impresiones. “Reduciremos la altura de la espuma en la parte de delante. La idea es que sea dos tercios inferior cuando terminemos las pruebas, comentaba Dominic Coffey, técnico de Dallara, para RACER.com.
“Se ha hecho muy bien en todas las pruebas realizadas, y el Dr. Trammel está satisfecho con los resultados”, añadía Belli. “Cuando haces un test de impacto, toda la espuma se comprime pero vuelve a su posición natural. No se comprime y toma una nueva forma”.
Se seguirán realizando modificaciones y mejoras en las próximas semanas, hasta que la IndyCar quede totalmente satisfecha con los resultados. Una vez aprobado, los reposacabezas se producirán en masa. “Nuestro objetivo es poder presentarlos en mayo, pero si se puede hacer antes, mejor. Una vez se implemente, se usará en todas las pistas”, finalizaba Belli.
