A pesar de sus 60 años, Carlos Sainz tiene en mente ganar otro Dakar. La última edición no salió según lo esperado, ya que su Audi se comportó según lo esperado, pero una serie de accidentes le dejaron fuera.
Del más gordo, el que provocó su abandono, se sigue recuperando y por eso no ha podido empezar la temporada con su equipo de Extreme E, donde Mattias Ekström ha sido su sustituto junto a Laia Sanz, ganando en el primer X Prix de la temporada.
“Cuando yo aposté por ella hace dos años, que quería cambiar de motos a coches, fue una puesta valiente, pero sabía con quién me la jugaba. A Laia le costó un poco, como es normal, pero hizo una transición muy buena, el año pasado ya estuvimos a punto de ganar alguna carrera y este año han ganado la primera carrera y estoy encantado”, comentaba ‘El Matador’ sobre esa victoria.
El objetivo es volver al Rally más duro del Mundo, si es con Audi mejor, y conseguir el cuarta Dakar con una cuarta marca diferente. “Mi último gran objetivo es ganar con otra marca distinta el Dakar. El reto de ganar el Dakar por primera vez con un coche híbrido eléctrico”, ha comentado en el MARCA Sport Weekend 2023.
Los coches de la categoría T1.U como es el Audi han sido maltratados por la FIA en estos dos años. El peso es mayor que los T1+, por lo tanto, no pueden conseguir la potencia deseada. Por eso mismo, los alemanes se plantean renunciar. “Quizá FIA y ASO se han dado cuenta de que no nos han tratado muy bien en las dos últimas ediciones. De eso va a depender incluso que Audi se plantee correr el Dakar. Entiendo que si no nos dan la potencia que por peso nos corresponde se replanteará correr el Dakar. Si está Audi, estaré en el Dakar”, explicaba Sainz.
Otras de las grandes conversaciones del día a día es la situación de Ferrari en Fórmula 1, que involucra a su hijo. “Ha sido un poco jarro de agua fría el inicio de temporada del equipo. Todos esperábamos mucho más, pero las carreras son así”, concluía Sainz.
