Fernando Alonso ha vuelto a subir al podio en el Gran Premio de Australia. El piloto asturiano ha vuelto a vivir una carrera extremadamente caótica y repleta de incertidumbres, que no ha dudado en definir como «una montaña rusa de emociones».
Alonso ha comenzado la carrera en Albert Park desde la cuarta posición, aunque ha caído a la quinta en los primeros metros. Después, la primera bandeja roja le ha beneficiado y le ha permitido escalar a la tercera posición de la parrilla, en la que se ha mantenido hasta el final. Eso sí, en la relanzada de la segunda bandera roja recibió un toque por detrás de Carlos Sainz que le relegó al fondo de la parrilla, afortunadamente sin daños.
Sin embargo, Dirección de Carrera terminó devolviendo las posiciones previas a la bandera roja y, como consecuencia, Fernando ha sumado su tercer podio de la temporada. Además, considera que el toque de Carlos en absoluto fue a propósito y justifica que tenía las ruedas frías.
«Ha sido una montaña rusa de emociones. Han sucedido muchas cosas, sobre todo al principio y al final. En la última media hora ha sido difícil entender qué sucedía. La carrera ha sido buena por ritmo. Los Mercedes han sido muy rápidos. Lewis ha sido muy rápido, no he podido igualarme a él, así que cogemos ese tercer puesto», ha firmado Fernando al bajarse del coche.
«Era injusto, no sabía quién me había tocado. Luego vi que era Carlos y que tiene una penalización, seguramente también dura porque tienes las ruedas frías y no vas a chocar contra nadie. Cuando pones una bandera roja, que lo hacen por seguridad, cuando haces una salida otra vez con los 20 coches yendo a la primera curva, al final creas más peligro porque va a volver a suceder algo. Lo hablaremos en la próxima carrera. Contento por el podio, pero la última media hora fue confusa», ha añadido al respecto en Dazn.
Fernando tampoco considera que la bandera roja fuera necesaria, pues argumenta que es incluso más peligrosa que un simple coche de seguridad. «Creo que la bandera roja no era necesaria, para eso están los Safety Car. Luego cuando la pusieron era como una vuelta o dos de carrera, igual que pasó en Silverstone. Si hay un accidente antes de llegar al primer sector se vuelve a las posiciones», ha apuntado.
Este parón hasta la carrera en Bakú será un momento pare reflexionar y hacer balance sobre el rendimiento del coche. De momento, confía en seguir mejorando y continuar por la buena senda de la fiabilidad.
«Supongo que un poco más arriba en el podio con tres terceros lugares. A ver si podemos conseguir tres segundos lugares. Increíble el coche también, la fiabilidad, pero de momento está siendo muy buena. Es importantísimo terminar terceros y cuartos hoy porque son muchos puntos para el equipo. Ferrari hoy solo tenía un coche en pista, Mercedes también, así que un domingo redondo», ha afirmado Fernando para cerrar.