El nuevo Cadillac V-Series ha empezado la temporada del WEC en un buen estado de forma. En la primera temporada del coche americano, ha cosechado dos cuartos puestos, uno en las 1000 Millas de Sebring, y otro en las 6 Horas de Portimao, tras salir octavo.
Durante la carrera en el trazado portugués, el equipo americano se vio obligado a hacer una estrategia alternativa debido a un gran plano de Westbrook en los primeros compases de carrera. El plan era hacer un doble stint con las ruedas, lo que obligó al piloto a aguantar durante más de 20 minutos fuertes vibraciones hasta el cambio de ruedas por unas nuevas.
Earl Bamber se subió al coche tras poco más de dos horas de competición. El neozelandés logró subir hasta el tercer puesto justo antes de dejar a Lynn a manos del Cadillac. El piloto del equipo americano se mostró satisfecho con el rendimiento del coche. “El coche fue muy bien. Era la primera vez para nosotros en un trazado europeo. Si somos sinceros, aún tenemos mucho que aprender, pero creo que podemos seguir mejorando. Hemos hecho un buen paso adelante y creo que podemos acercarnos a Toyota», comenta, según recoge Motorposrt.com.
Por su lado, Westbrook comentó como fue el momento de la bloqueada y su carrera. “Pude subir unas posiciones y luego me quedé detrás de los coches. Como esperábamos, al final del stint, el coche tenía buen ritmo. Al momento de hacer la primera parada, entré detrás del Peugeot, y me dio la sensación que reducía mucho la velocidad. Estaba justo detrás suyo, perdí carga aerodinámica y tuve un gran bloqueo. No sabía si tenía un plano o no. Salí a pista y vi que estaba mal, así que traté de aguantar, pero tuvimos que cambiar la estrategia».
Por último, Alex Lynn opina que el coche de seguridad privó al equipo de celebrar su primer podio. “Tuvimos mala suerte con el coche de seguridad, porque perdimos el podio. Aún así, el coche fue muy rápido y hemos aprendido mucho. Estoy muy agradecido a Richard y Earl por la gran conducción y estoy deseando llegar a la próxima carrera».