Los de Woking llevaron mejoras al Gran Premio de Azerbaiyán, que supuestamente iban a funcionar mejor en Miami, pero no ha sido así. Los de Woking se volvieron a casa sin puntos.
Landor Norris perdía unas dos décimas por vuelta después de que Nyck de Vries impactara con la parte trasera de su monoplaza en la salida. Terminó decimoséptimo. Por otro lado, Oscar Piastri tampoco pudo avanzar mucho más, dos puestos por debajo de su compañero. E incluso estuvo a punto de retirarse por problemas en los frenos.
En Bakú se hizo un buen trabajo en carrera, con ambos coches en la novena y undécima posición, pero Miami les ha devuelto a la realidad. Andrea Stella lo ha definido como “un golpe de realidad”. El director de McLaren dice que volverán a revisar los procesos de desarrollo. “La información que obtuvimos aquí nos ayuda a entender que algunas direcciones de desarrollo todavía necesitan ser revisadas, como mejorar el coche en circuitos de freno y aceleración. Por el momento, no funciona en estas condiciones. En circuitos como éste, se convierte en una limitación demasiado grande”.
El italiano dice que la única oportunidad de avanzar para sus pilotos era un coche de seguridad o abandonos que no llegaron. En Miami terminaron todos los pilotos. “Habríamos necesitado algún incidente en la carrera, un coche de seguridad o algo así, pero no pasó nada. Así que las limitaciones desde el punto de vista del rendimiento no pudieron superarse gracias a algunas situaciones. Nos vamos sin puntos”.
Stella, dice, que el resto de equipos dieron pasos más grandes de cara al GP de Miami y considera que “ningún coche fue lento” durante el fin de semana. “Yo no diría que éramos muy diferentes a lo que hemos sido en 2023. Es sólo que los demás dieron un gran paso adelante y mucho de ello se debe a las características de los coches, en mi opinión”, cerraba.
