Con el KO técnico de Sébastien Loeb en la undécima Especial, Carlos Sainz está a 175 kilómetros de conseguir su cuarto Dakar, con una cuarta marca diferente y el primero para Audi.
A pesar de que la ventaja de Sainz en la general es de más de una hora sobre Guillaume de Mevius, pide calma porque queda una etapa que terminar. Además, confesó que al ver a su rival parado decidió bajar el timo para mantener su primera posición en la general. “Cuando hay tantas piedras, vas pensando que en cualquier momento puede llegar un pinchazo y entonces si llega otro segundo, te complica el tema”, comentaba el español al bajar de su Audi para los medios de comunicación.
Sainz salió a la Especial sin apenas arriesgar y estuvo a punto de ganar incluso, pero todo cambió cuando vio a Loeb parado. “Sí, sí he levantado, en el momento que le he visto al menos sabía que había recuperado diez minutos, pero no sabía el problema que tenía, aunque sí que había salido diez minutos más tarde, y me lo he tomado con calma”.
El piloto de Audi prefiere ser prudente y esperar a que termine la Especial de este viernes. “Hoy era una etapa muy importante para acabar sin problemas. Fundamental, era la etapa del rally, pero mi experiencia también me dice que las carreras hay que acabarlas y queda un día, hay seguir la misma rutina y seguir concentrados. Con la experiencia que tengo sé que las careras hay que terminarlas, tuvimos una etapa muy buena, pero quedan todavía 170 kilómetros. Hay que seguir concentrados”.
Lucas Cruz, que tiene gran culpa del resultado conseguido hasta hoy, también busca apaciguar los ánimos. “Estamos contentos por el equipo por el resultado de hoy. Hemos luchado con la cabeza fría durante las dos semanas, y queda el remate final en la última etapa de mañana. Hay que salir concentrados, salir a nuestro ritmo y acabar”, decía, según recoge MARCA.com.
El copiloto de Sainz desvela que no cambió la situación cuando vieron parados a Loeb. “Lo ves parado, sabes que tiene para un ratito… pero no sabes cuánto tiene. Debes seguir en lo tuyo, seguir haciéndolo con la misma tensión que en la primera parte, y seguir trabajando, porque si no, pierdes concentración y los errores llegan cuando menos te lo esperas”.
Y, para terminar, un gran reconocimiento a Audi. “Se lo merecen. Son tres años de trabajo muy duros, de un proyecto muy ambicioso. Audi ha sido la única marca valiente en hacer algo así, y creo que la gente no es consciente de la tecnología que tiene este coche para hacerlo funcionar en las condiciones que nos están sometiendo aquí en el Dakar”, concluía Cruz.
