Sam Bird logra la victoria en una última vuelta de infarto

Bird en el ePrix de Sao Paulo | Fuente: Getty Images

Pascal Wehrlein defendía la pole en la cuarta ronda del campeonato, en Sao Paulo frente a los DS Penske que salían en segunda y tercera posición.

Mitch Evans hacía una gran salida subiendo hasta la tercera posición, mientras Jean-Éric Vergne caía a la cuarta posición. A pesar del baile de posiciones, la salida era muy limpia y Wehrlein abría un pequeño hueco frente a sus rivales. En la segunda vuelta Max Günther recibía una penalización de Stop & Go de diez segundos, aunque no influía en mucho ya que el piloto de Maserati ya era último.

Ya en la tercera vuelta, Wehrlein y Stoffel Vandoorne activaron el modo ataque por 2 minutos. Esto permitía a Antonio Félix Da Costa ponerse líder de carrera. La estrategia era clara; nadie quería liderar la carrera y esto hacía que hubiera un grupo muy compacto. Sam Bird, aprovechaba la pelea entre Wehrlein y Evans para activar el modo ataque a la par que se ponía en el liderato. Tras siete vueltas vueltas, el Safety Car hacía acto de presencia debido a trozos de alerón repartidos por todo la pista. Bird, salía beneficiado ya que justo había activado el resto de su modo ataque, y podía deshacerse de él antes que el resto.

Dos vueltas después, la carrera se volvía a reanudar con los Porsche en cabeza y Vergne y Bird en persecución. En la misma vuelta de bandera verde, los tres primeros activaban el modo ataque. Bird se veía en cabeza, aunque levantaba el acelerador y Evans se quedaba liderando. Esta estrategia de evitar el liderato se debe a un claro ahorro de energía de cara a poder atacar a final de la carrera.

Jake Dennis, que salía décimo, tras 13 vueltas se ponía en liderato y trataba de estirar el grupo aumentando el ritmo de carrera. La bandera amarilla ondeaba de nuevo en la vuelta 16 provocado por el abandono de Nick Cassidy tras golpear el muro y perder uno de los neumáticos. En la vuelta 20 se reanudaba la carrera. Los Porsche (tercero y quinto) partían con ventaja frente al resto por tener un mayor porcentaje de batería ahorrado frente a los líderes de carrera.

A pesar de tener menos energía que los Porsche, Bird empezaba a aumentar el ritmo frente a sus rivales. A falta de 7 vueltas para el final, le decían a Wehrlein que era el momento de atacar, estando en tercera posición. Tras varios giros analizando al rival, Mitch Evans atacaba a Sam Bird, consolidándose en el liderato, mientras el de McLaren se veía amenazado también por Wehrlein y Dennis. Sin embargo, el de Porsche no lograba pasar a Bird y perdía la tercera posición frente al piloto de Andretti.

Por otra parte, la carrera se alargaba en 3 vueltas por lo sucedido durante la sesión. Mientras los DS Penske se quedaban atrás, en séptima y octava posición, cuando en los entrenamientos eran de los más rápidos. A pesar de ser el piloto con más energía de la cabeza, Dennis se quedaba atrás y sufría el ataque de Wehrlein. Por delante, Evans sufría también el ataque de Bird a falta de dos vueltas del final.

Finalmente Sam Bird arrebataba la victoria a Evans con un adelantamiento espectacular en las dos últimas curvas. Mientras, Dennis claramente con algún problema, se veía adelantado en línea de meta por Rowland, que cerraba el podio y por Wehrlein que terminaba cuarto.