Oliver Rowland tenía la victoria en el bolsillo a falta de la última vuelta en Misano. A falta de ocho curvas para el final, el británico se quedó sin energía por un fallo cálculo garrafal por parte de su equipo.
La ronda 7 en Misano pasó de ser todo de color de rosas, a una auténtica pesadilla para Rowland. Un fallo de procedimiento en la gestión del software, que hizo que Oliver tuviera un porcentaje de energía menor que el de sus rivales que estaban por detrás, mientras iba en cabeza echó por tierra su esfuerzo y, por tanto, una doble victoria en el trazado italiano.
De hecho, el propio Rowland habló sobre este fatídico error tras la carrera. “Fui rápido en las curvas, seguí mi objetivo y la estrategia como habíamos planeado. Este tipo de cosas nunca nos ha pasado, hoy en día es un procedimiento tan simple, que tuvimos que revisar”, dijo el piloto británico en unas declaraciones que recoge Motorsport.com.
En la Fórmula E, los equipos no reciben datos de telemetría de forma remota, excepto algunos parámetros que tienen que ver con la fiabilidad del monoplaza. Los ingenieros deben guiarse por la información transmitida por la FIA, para así evaluar la mejor estrategia. El piloto es quien informa al equipo y lee valores en el volante, que son indicados por el software mediante un código.
“Es frustrante, pero si pensara que esta es mi única oportunidad de ganar en toda la temporada, estaría realmente decepcionado, pero siento que todavía habrá oportunidades. Tengo confianza gracias a los puntos que hemos ganado hasta ahora y las actuaciones que hemos mostrado, así que tengo confianza para el futuro”, concluyó Rowland, quién estuvo a punto de formar un doblete en Misano.
Tommaso Volpe, jefe de Nissan, también reconoció el gran error que tuvo el equipo desde el inicio de la prueba. “Simplemente cometimos un error en el procedimiento de salida y comprometió los datos sobre los cuales estábamos implementando la estrategia. Fue un error estúpido que nos engañó durante toda la carrera”, dijo para The Race.
“Lo que sucedió en la parrilla es como si un parámetro en el software no se restableciera correctamente. Tuvimos que hacerlo de forma manual y eso afectó a nuestro proceso y operaciones habituales. Es la causa fundamental del problema que tuvimos al final de la carrera”, añade Volpe. “Es frustrante porque es un trámite pequeño que hay que hacer al principio y no lo hicimos porque teníamos prisa por otras razones”, concluyó.
