Bearman quiere ganar el campeonato de Fórmula 2, antes de centrarse en la Fórmula 1

Oliver Bearman en el garaje de Ferrari en el GP de Yeda | Fuente: GettyImages

Oliver Berman, piloto de PREMA Racing en Fórmula 2, está muy feliz y orgulloso por los entrenamientos libres que ha hecho con Haas. Además, en el Gran Premio de Arabia Saudí, se llevó los primeros puntos de su carrera deportiva en la Fórmula 1, tras sustituir a Sainz por la operación de apendicitis.

El piloto británico está acaparando las miradas a la Fórmula 1, ya que el año que viene muchos pilotos finalizan sus respectivos contratos. Berman es uno de esos pilotos que está a la mira de los equipos y  quiere aprovechar la oportunidad para dar el salto a la máxima categoría del automovilismo. Pero él lo tiene un objetivo claro: ganar el campeonato de Fórmula 2 y después ya se decidirá que se hace el año que viene.

En Yeda, Bearman fue convocado por Ferrari en los los terceros libres para sustituir a Sainz por la operación de apendicitis. Acabó décimo, a menos de un segundo de Max Verstappen. En clasificación no pudo llegar a la Q3, logró un undécimo lugar. Pero en la carrera brilló y finalizó en séptima posición, logrando siete puntos para él y Ferrari en el mundial. El británico ha sido el piloto más joven en correr un Gran Premio con Ferrari en toda la historia, con 18 años.

Este fin de semana, Bearman fue el invitado de honor del Cavallino en Mugello, con motivo del fin de semana inaugural del Ferrari Challenge Europe. El británico habló de sus objetivos para el futuro:  “Para esta temporada mis objetivos conciernen únicamente a la F2. Haré algunos FP1 con Haas, lo cual será una buena experiencia para aprender en la F1”, dijo Bearman en el medio de comunicación, Formu1a.com.

Además, Bearman contó una anécdota divertida relacionada con la experiencia que tuvo en Mugello junto a su padre. “Hice unas 10 vueltas en total, una de las cuales con mi papá, fue maravillosa. Él ya está demasiado mayor, tiene miedo, hace mucho tiempo que no sale a la pista, así que fue genial. Cuando sube al coche conmigo está más nervioso, prefiere mirarme desde el garaje.