Agustín Canapino volverá a subirse al Juncos el próximo fin de semana y no se volverá a bajar durante el resto de la temporada.
Estas últimas semanas han sido un maremoto de emociones para el argentino. Su equipo decidió bajarle del coche en el Gran Premio de Road America tras estar involucrado en una polémica con un choque que tuvo con Théo Pourchaire en Detroit. Fue Nolan Siegel quien se puso a los mandos del #78 para terminar en la vigesimotercera posición la pasada semana.
Así pues, este famoso choque se saldó con una oleada de comentarios hirientes para el francés en redes sociales. Por ello, McLaren emitió un comunicado apoyando a su piloto y rechazando la ola de insultos que se produjo en aquel momento. Debido a la supuesta pasividad del equipo Juncos ante todo aquel entuerto, McLaren decidió finalmente cortar relaciones con la estructura de Ricardo Juncos. Ambos equipos mantenían una estrecha relación comercial.
Canapino, poco después, declaró estar pasándolo mal por aquella situación. El piloto pidió que “no volviera a ocurrir” y que esperaba “no tener que volver a hablar nunca más del tema”. Debido a esto, Juncos decidió que era mejor apartarlo temporalmente para la carrera en Road America, de tal manera que pudiese descansar y reflexionar.
Finalmente, parece que el mal ambiente se ha disipado, ya que el equipo ha hecho oficial que se quedará el resto de la temporada y que disputará la próxima carrera en Laguna Seca. Muchos afirmaban que podría no volver a correr más en la IndyCar, pero finalmente no será así.
No es la primera vez que el campeón de turismos de Argentina ha tenido que pasar por algo así. El año pasado, ya paso algo similar con su compañero de equipo, Callum Ilott, que acabaría con el británico yéndose del equipo. Esto demuestra que el acoso masivo en redes, más allá de parecer apoyar a un piloto en concreto, no hace sino perjudicar a ambas partes, además de dar una mala imagen a la categoría.
