McLaren llega al Gran Premio de Italia después de conseguir solo seis puntos en la cita de Zandvoort. Sigue siendo insuficiente para mantenerse en la pelea por la cuarta posición y aunque intuye que sufrirán en Monza, confían en ser capaces de volver a las sensaciones de la temporada pasada.
Los de Woking firmaron un doblete el año pasado en la pista italiana, con Daniel Ricciardo ganando la carrera. Este año, la situación es completamente diferente, pues el rendimiento está por debajo de lo esperado y llevan sufriendo varias carreras. En Países Bajos solo sumaron seis puntos, los que consiguió Lando Norris, pues Ricciardo solo pudo ser decimoséptimo.
Daniel está fuera de McLaren para 2023, y muy probablemente también esté fuera de la Fórmula 1, y lo cierto es que solo ha puntuado en cuatro carreras esta temporada. En Monza, un circuito que se le da bien, tiene la oportunidad de resarcirse y coger impulso para afrontar la recta final de la temporada con una actitud positiva.
Lando Norris
Norris tiene muy buenos recuerdos de Monza, pues el año pasado fue segundo y en 2020 se quedó a dos segundos y medio de alcanzar el podio. El objetivo es recrear esas sensaciones este fin de semana, aunque siendo consciente de que va a ser duro.
“El Gran Premio de Italia siempre es un fin de semana emocionante. Mis últimos dos viajes a Monza han sido increíblemente positivos, ya que el año pasado tuve allí uno de mis recuerdos favoritos de Fórmula 1, así que intentemos recrear algunas de esas sensaciones este fin de semana. Parece que va a ser un fin de semana mucho más duro para nosotros este año, pero todavía hay oportunidad de sumar puntos y de que tengan un impacto en el Campeonato de Constructores”, ha afirmado en un comunicado oficial.
“Siendo el Templo de la Velocidad, realmente tengo ganas de salir a la pista y de ver cuánto podemos empujar el coche. Necesitamos un gran último empujón para terminar la gira europea dando todo lo que tenemos”.
Daniel Ricciardo
El circuito de Monza también es un lugar especial para Ricciardo, pues le ha dado buenos momentos a lo largo de su trayectoria deportiva. Aunque su situación esta temporada es infinitamente peor a años anteriores, confía en que la “magia italiana” salga a relucir.
“Monza siempre tendrá un lugar especial en mi corazón. Si bien otro doblete no es realista en este momento, espero que podamos ofrecer un poco de magia italiana. Estoy emocionado por la pista, los increíbles aficionados y la increíble comida: la combinación clave para tener un buen fin de semana”, ha apuntado.
Daniel necesita volver a puntuar este fin de semana y para conseguirlo ha trabajado duro con los datos que recabaron en Bélgica y en Países Bajos. El objetivo es terminar el triplete y la gira europea en el mejor estado de forma posible.
“Zandvoort fue un circuito difícil para mí, pero mantengo la cabeza alta. Voy a seguir empujando e intentaré terminar la temporada con un buen resultado. Hemos mirado bien los datos y hemos estudiado a fondo cómo podemos volver a estar en los puntos este fin de semana. Es probable que sea otro fin de semana difícil por la naturaleza de la pista y está claro que tenemos trabajo por delante, pero tengo confianza plena en el equipo de cara a la última carrera de este triplete”, ha añadido para cerrar.
