Antes del Gran Premio de Estados Unidos, la Federación Internacional de Automovilismo emitió un comunicado sobre las conclusiones que se habían sacado tras lo ocurrido en Suzuka.
Una grúa entró a pista para retirar el coche de Carlos Sainz, quien había tenido un accidente en la primera vuelta de la carrera. Tras el coche de seguridad, 18 coches pasaron a dos metros de ese vehículo de recuperación a una velocidad prudente. Nadie tenía en cuenta a Pierre Gasly, quien pasó a más de 200 KM/H.
Un episodio que recordó al accidente de Jules Bianchi en 2014, además, en condiciones meteorológicas similares y con una visibilidad escasa. La FIA entiende que debe poner más énfasis a este tipo de situaciones y se han realizado una serie de modificaciones.
Los pilotos querían hablar con la FIA en Estados Unidos, pero este comunicado ha obligado a posponer la reunión a México. Todos los involucrados quieren leer con calma todos los puntos y analizar que más mejoras se pueden introducir. “Todos decidimos posponer las conversaciones de Suzuka a México porque muchos pilotos no tenían tiempo para leer el comunicado”, confirmaba Sainz para Motorsport.com tras la pole en Austin.
“Necesitábamos estos tres o cuatro días —entre las carreras de Austin y Ciudad de México— para leerlo y luego tener un comentario con nuestros equipos y todos los involucrados para ver qué otras ideas se nos ocurren. Se discutió la visibilidad en el informe de la FIA, que para mí en realidad es casi más importante que cualquier otra cosa”, continuaba el piloto de Ferrari.
Max Verstappen, al lado del madrileño durante estas declaraciones, volvió a incidir en esa baja visibilidad. Además, él pudo ver la grúa al ser el primero del pelotón, pero otro piloto podría haberse salido de la trayectoria para obtener algo de visibilidad y encontrarse con la grúa.
