Después de la primera semana de carrera, Gerard Farrés Güell afrontará las últimas etapas con muchas opciones de hacerse con el título en la categoría T4, ese que acarició en 2022.
El catalán, junto a Diego Ortega, es cuarto en la general a tan solo 6:19 minutos de Rokas Baciuska, el líder de esta categoría. Farrés Güell empezó el Dakar incómodo, pero cuando empezó a disfrutar, el objetivo se ha puesto muy de cara.
“No nos estamos guardando nada. No podemos. El ritmo de este año es muy superior al del curso pasado. No es que lo diga yo. Lo dicen todos en cada su categoría. Hay cada vez más pilotos rápidos”, decía en una charla durante la jornada de descanso, según publica MARCA.com.
Farrés no está sorprendido por el nivel que están mostrando Baciuska o Eryk Goczal —tercer clasificado de la categoría T4—, ya que están bien orientados gracias a sus copilotos, quienes tienen mucha experiencia en el Dakar. Hablamos, nada más y nada menos, de Oriol Vidal y Oriol Mena respectivamente. Además, si la mecánica ayuda, todo es más sencillo.
“Debemos seguir saliendo a tope. Cuando se pueda, ir al máximo, y si no procede, aflojar un poco. Tenemos que ser inteligentes para mantener la mecánica”, decía el piloto de South Racing sobre la segunda semana de este Dakar.
El de Manresa se ve mejor de lo que pensaba. Espera evitar la mala suerte, ya que cualquier avería le alejaría del título. “Estoy mejor de lo que esperaba. Estamos súper bien. Sólo nos encontramos a seis minutos de la cabeza y nos veo con opciones a todo”.
Ya lo avisó la organización, esta 45º edición del Dakar iba a ser una de las más duras que se recuerdan. Muchos pilotos lo han comentado a lo largo de estos. “Tenemos las cervicales muertas. No recuerdo ningún Dakar con dolor y en éste tengo mucho dolor en el cuerpo y Diego lo mismo. Esto es lo que estamos viviendo todos los pilotos, tanto de coches como motos. Estamos realmente cansados en este Dakar”, concluye Farrés Güell.
