Porsche parecía dominar la era Gen3 después de los ePrix de México y Arabia Saudí, pero en las últimas carreras se han ido desinflando. Pascal Wehrlein perdió el liderato tras la carrera disputada en Mónaco.
La escudería alemana tuvo contratiempos con el software en los primeros entrenamientos libres de Mónaco, que les impidió preparar la configuración de cara a la clasificación y carrera. Los dos pilotos se quedaron fuera de los duelos, pero la carrera se veía de otra manera. Antonio Félix Da Costa había ganado 12 posiciones hasta que Jake Hughes pinchó su neumático.
Wehrlein terminó décimo, pero no es suficiente para mantenerse al frente de la clasificación mundial. El alemán lleva sin subirse al podio desde su doble victoria en Diriyah. “Esperábamos algo mejor en Mónaco y estamos decepcionados de no haber podido mostrar el verdadero potencial de nuestro coche. Ahora tenemos que centrarnos en nuestros puntos fuertes y recuperar el rendimiento que hemos demostrado tantas veces este año”, comentaba el piloto de Porsche.
La caída de Porsche también ha significado un paso atrás de Avalanche Andretti, aunque Jake Dennis se ha subido al podio en las dos últimas carreras. Florian Modlinger, responsable del equipo en Fórmula E, invita al optimismo. “Durante la primera mitad de la temporada, subrayamos que somos capaces de luchar por victorias y lugares en el podio en una variedad de pistas”.
El rival a batir parece ser Jaguar, también Envision al llevar el mismo tren motriz. Prueba de ello son las tres victorias consecutivas que ha sumado el tren motriz británico. “Todavía nos quedan siete carreras. Estamos en la lucha por el campeonato y haremos todo lo posible para ganar una vez más muchos más puntos en las próximas carreras. Trabajaremos duro y confío en que volveremos a lograr mejores resultados en las próximas carreras”, cerraba Modlinger.
