El fin de semana en Silverstone no fue del todo positivo para Mercedes. A pesar de haber mejorado su desempeño con respecto a lo visto en Austria, el W14 parece aún lejos de ser una amenaza seria para Red Bull.
La clasificación supuso un varapalo importante en la confianza de los germanos. Aunque el ritmo de carrera pareció camuflar las carencias vistas el sábado, obteniendo un tercer lugar de la mano de Lewis Hamilton. Y es el heptacampeón del mundo quien se ha mostrado más crítico con el coche, aunque también conciliador en sus palabras según MARCA.
“Creo que sé exactamente lo que tenemos que hacer y necesitamos tener algunas conversaciones serias sobre lo que vamos a hacer en el futuro”. El principal problema de la nueva versión del W14 parece ser la parte trasera. Lewis ha expresado que, en cuanto este problema esté solucionado estarán ‘en camino’ para luchar con Red Bull y Max Verstappen.
Las novedades que introducía Mercedes para el pasado Gran Premio, centradas en el alerón delantero, no parecen haber cambiado demasiado las prestaciones del monoplaza. “Para nuestra decepción no hemos dado ese paso, por desgracia, y para nosotros ser sextos y séptimos no ha sido una gran sensación”, comentaba el británico para RaceFans.net.
Una de las sorpresas del fin de semana ha sido McLaren. El trabajo de los de Woking y su recuperación desde el fondo de la parrilla hasta la lucha por los podios ha sorprendido a todos, incluido a Mercedes. “Ha sido increíble ver lo bien que iba su coche en las curvas rápidas. Sé que tenemos trabajo que hacer para ponernos al día”, cerraba Hamilton.
Los dominadores de la era híbrida no han terminado de encontrar su punto óptimo de rendimiento en la nueva normativa. Estos meses deberán seguir trabajando con el objetivo de volver a pelear los mundiales a partir de 2024.
