Después del podio en Zandvoort, Alpine recuperó la sonrisa, pero sabían que Monza no se iba a adaptar a su monoplaza. Pierre Gasly reconoció después de la clasificación que ya sospechaba que caerían en la Q1.
El piloto francés tomará la salida desde la decimoséptima posición, mientras que su compañero saldrá un puesto por detrás al ser tres milésimas más lento. Simplemente, el A523 no funcionaba en las rectas. “Desafortunadamente, durante todo el fin de semana estuve bastante contento con el equilibrio del coche, pero hemos estado sólo a dos segundos del ritmo todo el tiempo”, decía Gasly para Motorsport.com.
El Gran Premio de Italia estaba marcado en rojo en la fábrica francesa. “Sabíamos que venir aquí en Monza sería el fin de semana más duro del año con todas estas largas rectas. Y sí, claramente ha sido así. Siempre tienes optimismo de que tal vez con un neumático duro o algo así puedas pasar, pero eso es todo lo que teníamos, desafortunadamente. Y sí, ha sido un fin de semana difícil hasta ahora”.
Gasly pensaba que la goma dura usada en Q1 podría haber ayudado, pero, todo lo contrario. “Creo que el neumático duro es probablemente el peor de todos. Estaba muy contento con el blando, bastante contento con el medio, y con el duro, el equilibrio en las curvas ha sido simplemente peor y no va en la dirección correcta para nuestro coche”.
El francés asegura que saben donde han fallado, pero sabe que no tienen que perder el tiempo. “Creo que tendremos que analizar, revisar y encontrar mejores soluciones para el próximo año. En última instancia, este fin de semana, solo la velocidad no está ahí”.
