Los residentes cercanos al mítico circuito de Laguna Seca, situado en la región de Monterey, presentaron una demanda por el exceso de ruido y actividad en la pista durante el año. Los propietarios responden.
Este trazado es propiedad del condado de Montery, que firmó un acuerdo a largo plazo para mantener su futuro con la organización sin fines de lucro, Friends of Laguna Seca, en julio de la temporada pasada. Esta sede es famosa por la chicane que recibe el nombre de sacacorchos y que la IndyCar volverá a visitar en el mes de junio.
El pasado 12 de diciembre, un grupo de vecinos, bajo el nombre de Highway 68 Coalition, presentó una demanda contra el condado, alegando problemas con el aumento de ruido y tráfico durante los fines de semana de carrera. “Nosotros también vivimos aquí y compartimos las mismas preocupaciones que nuestros vecinos sobre el ruido y el tráfico”, dijo Ross Merrill, presidente de FLS, según recoge Motorsport.com.
Merrill asegura que trabajan con sus socios para aislar lo máximo al circuito. “Nuestro equipo de líderes empresariales y comunitarios experimentados está ansioso por avanzar para revivir este alimento básico en nuestra comunidad para décadas de éxito futuro y generación de ingresos para el condado de Monterey”.
FLS (Friends of Laguna Seca) afirma que está “obligado en el acuerdo de concesión al uso histórico del Área Recreativa de Laguna Seca y las políticas existentes que limitan la asistencia y el sonido en el Parque y obligado bajo el contrato a invertir en las instalaciones e infraestructura, incluyendo un sonido estudio y mitigación del ruido”.
En la denuncia, los vecinos se centran en el mayor número de eventos en Laguna Seca. “Estos aumentos incluyen, entre otros, más días de eventos en la pista de carreras, mayores niveles de ruido permitidos, días adicionales de alquiler de pistas con ruido intensificado superior a 100 dB, aumento del tráfico, suministro y calidad de agua inadecuados, eliminación inadecuada de aguas residuales y ampliación de la zona de acampada”.
