Después del fracaso en el Dakar 2024, Nasser Al-Attiyah pone en prácticas las lecciones que aprendió en el desierto. Su primera decisión es separarse de Matthieu Baumel tras años de éxitos.
El catarí defendía título en Arabia Saudí, pero se encontró fuera de carrera al término de la primera semana. También criticó a Audi, que finalmente ganaron el Rally gracias a Carlos Sainz y Lucas Cruz. Al-Attiyah no tuvo su mejor Dakar con Prodrive, señalando la fragilidad del Hunter T1+ como mayor punto débil. “No quiero volver a conducir este coche nunca más”, llegó a comentar.
El cinco veces ganador del Dakar dijo que no estaba satisfecho con el trabajo hecho y decidió prescindir de Baumel tras diez años de relación profesional. Se habló de la posibilidad de tener al lado a Boulanger, que ha corrido las últimas ediciones del Rally más duro del Mundo con Stéphane Peterhansel y ganador en 2021 a bordo del MINI John Cooper Works DKR. El propio copiloto ha negado la posibilidad de estar con Al-Attiyah en un futuro cercano.
El nuevo copiloto para los rallies será Giovanni Bernacchini, que hizo su debut en el Mundial de Rallies en 2010, y ya harán su primera carrera en el Rally de Catar a bordo del VW Polo R5, primera prueba del campeonato de rallies de Oriente Medio, donde Al-Attiyah persigue el récord de títulos que ostenta Mohammed Ben Sulayem.
En las últimas horas se ha presentando el proyecto de Dacia para la próxima temporada, el Sandrider, pero hará su debut en el Rally de Marruecos del próximo mes de octubre. Al-Attiyah no estuvo en la presentación, a la que sí asistieron Cristina Gutiérrez y Sébastien Loeb con sus respectivos copilotos.
