Tras los daños recibidos por varios contactos con los LMGT3, el #6 tuvo que hacer una parada improvisada con la que, según Kevin Estre, “temió” perder el liderato.
Hace un par de días finalizó la primera cita del Campeonato de Resistencia con los 1812 kilómetros de Catar. La victoria absoluta se la llevó el Porsche 963 #6 pilotado por Kevin Estre, Laurens Vanthoor y André Lotterer. A pesar del triunfo, no estuvieron exentos de problemas y contratiempos, ya que en las últimas horas de carrera el coche sufrió daños por contacto con unos LMGT3.
Las colisiones provocaron que el equipo Penske tuviese que añadir una parada más, la cual no estaba programada en un inicio. El coche cada vez se volvía más difícil de conducir, según los propios pilotos, aunque consiguieron mantener la distancia con Peugeot, quienes colocaron uno de sus 9X8 en segunda posición hasta su amargo retiro.
“El coche era difícil de pilotar, pero la diferencia se mantuvo bastante constante, así que confiaba en que podríamos terminar la carrera así. Cuando me dijeron que parara, pensé, ‘¡vamos…!’ Pero me dijeron que no me preocupara. Que sólo será una breve parada y que todo está bajo control”, dijo Estre en unas declaraciones recogidas por Motorsport.com.
El equipo no intentó arreglar los daños sufridos en el pontón, sino que, simplemente, pegaron un nuevo dorsal. Según el reglamento, los dorsales “deben permanecer visibles en todas las circunstancias”. En esa zona también se sitúan las luces que indican si el coche se encuentra entre los tres primeros. Sobre eso, se determina que “el sistema de luces de líder debe estar operativo en todo momento”. En caso negativo, “se aplicará una penalización a discreción de los comisarios”, según recoge el documento.
“Me dijeron que el suelo estaba destrozado, que había un agujero en la carrocería y así lo sentí. Tuve mucho subviraje. En aire limpio iba bastante bien, pero con un poco de vibración. Cuando seguía a otro coche definitivamente tenía problemas”, confirmaba el alemán.
La parada en boxes de emergencia le costó al #6 unos 47 segundos. A pesar de eso, le permitió mantener una ventaja de algo más de 40 segundos con el Peugeot #98. Finalmente, consiguieron llevarse la victoria, seguidos del Porsche del equipo JOTA que compartían Will Stevens , Callum Ilott y Norman Nato, a una distancia de 33 segundos.
Sin duda, un inicio increíble para Porsche en el mundo de la resistencia. Actualmente, tienen un pleno de victorias en 2024, tras ganar en la prueba inaugural de la IMSA en las 24 horas de Daytona y llevarse el triunfo también en los 1812 kilómetros de Catar del WEC.
