En el Gran Premio de Mónaco, la clasificación es clave y Mercedes consiguió uno de los resultados más consistentes en toda la temporada. Ambos pilotos aseguran que el ritmo fue alentador en el Principado y miran con optimismo a Canadá.
George Russell terminó quinto, por delante de Max Verstappen, a pesar de no hacer la parada tras un cambio de neumáticos bajo bandera roja. “Fue la mejor carrera de nuestra temporada hasta ahora. Tuvimos un buen ritmo y pudimos demostrarlo cerca del final, a pesar de llevar neumáticos medios viejos de 70 vueltas. Nos estábamos acercando a los cuatro primeros al final y solo terminamos a unos pocos segundos de la primera posición. Hay muchos aspectos positivos que sacar del fin de semana en su conjunto”.
Lewis Hamilton se despedirá de Mercedes en Abu Dabi, pero hasta entonces queda mucho. El británico espera estar luchando con los equipos de delante gracias a las actualizaciones que han llegado en estas dos últimas carreras y las que vienen. “Ha habido muchas señales alentadoras de nuestro desempeño este fin de semana. El equipo ha trabajado muy duro para traer actualizaciones al coche y tenemos más por venir en las próximas carreras. Hemos dado un paso adelante con el coche y, si podemos seguir dando algunos más, entonces, con suerte, podremos meternos en la pelea con los tres equipos que tenemos delante”.
Toto Wolff, jefe del equipo, asegura que van en buen camino y explica su argumento. “Estuvimos mucho más cerca de lo que lo hemos estado en la clasificación en lo que va de año y mostramos un buen ritmo durante toda la carrera. La trayectoria va en la dirección correcta. Hemos entendido dónde necesitamos mejorar el coche de equilibrio y estamos trayendo actualizaciones para mejorarlo”.
De todos modos, el austriaco no descarta malas noticias en algunos eventos porque el W15 sigue siendo un coche bastante impredecible. “Sabemos que habrá altibajos dependiendo de los circuitos a los que vayamos, pero en general estoy contento con la dirección del desarrollo. Veamos cómo nos desempeñamos en Canadá”, cerraba Wolff.
