En la primera curva del Gran Premio de Hungría, Charles Leclerc sufrió un golpe lateral por parte de Lance Stroll que le dejó fuera de carrera. Además de eso, Ferrari confirma que el motor del monegasco será desechado.
Ferrari esperaba un buen resultado en Hungría gracias a las condiciones climatológicas que se dieron. Leclerc se había aupado hasta el tercer puesto encarando la primera curva, pero llegó Stroll con su Aston Martin para mandarle al garaje, ya que tuvo que decir adiós a la carrera.
El motor fue mandado a Maranello para someterse a un examen que ha tenido lugar este lunes. Resultó “irreparablemente dañado y no se puede volver a utilizar”, confirmaba la Scuderia en un comunicado. Por otro lado, la reparación del SF21 trastocará el presupuesto de los italianos debido al límite presupuestario.
Ferrari también da por hecho que, a falta de doce carreras para terminar la temporada, sea inevitable montar un cuarto ICE, por lo tanto, sufrir penalizaciones en parrilla en el caso de Leclerc. Un revés para sus aspiraciones en el Mundial que es conseguir el tercer puesto ante McLaren.
Al acabar el Gran Premio de Hungría, Mattia Binotto propuso que los pilotos culpables de los incidentes paguen las reparaciones de los equipos y pilotos afectados. Insta a la FIA de que es el momento de ser más responsable. Nove justo tener que modificar el presupuesto cuando hay daños que no vienen del lado de su piloto.
Una idea que también apoya Christian Horner. En las dos últimas carreras ha visto como un Mercedes echaba a uno de sus Red Bull de pista y en Hungría, a los dos. Los austriacos van a pagar un precio demasiado alto, que podría interferir en los futuros desarrollos de este 2021 y, por supuesto, en su lucha con Mercedes por el Mundial.
