El director técnico de Mercedes asegura que el invierno ha servido para resetear. De todos modos, Mike Elliott sabe que no volverán a estar delante de los rivales al comenzar el año.
Mercedes tiene muchas esperanzas puestas en el W14, pero tampoco se olvidan de donde vienen. “El año pasado, cuando nos dimos cuenta de todo lo que teníamos que hacer, necesitamos trabajar muy duro para seguir hacia delante. A final de temporada, vimos la mejora en el rendimiento y el invierno nos ha ayudado a resetear”, empezaba diciendo Elliott.
La reacción dentro de los alemanes no fue de buscar culpables. Elliott habló con orgullo de todo el trabajo que se hizo en la fábrica durante el 2022. “Superamos la fase de aprendizaje y entendimos los problemas para empezar el desarrollo, para así llegar a una posición en la que éramos más y más competitivos hasta ganar en Brasil”.
El objetivo es el Mundial, pero con prudencia
Red Bull y Ferrari fueron muy superiores a Mercedes durante la pasada campaña. Elliott sabe que no deben ponerse el listón muy alto. “No nos hemos hecho ilusiones y sabemos que va a ser duro. Vamos a empezar por detrás y no somos los favoritos, es una posición poco habitual para nosotros en los últimos diez años. Estamos centrados en nosotros mismos e intentamos hacer el mejor trabajo posible. No puedo estar más orgulloso del trabajo del equipo”.
Además del cambio de Reglamento, al que todos los equipos se deben amoldar, así como los nuevos neumáticos de Pirelli, Mercedes asegura que ya tienen mejoras para llevar en las primeras carreras. “Ya tenemos algunas mejoras preparadas para las primeras carreras. Nuestro objetivo en los test será entender más sobre el coche y desbloquear rendimiento. Hay que conseguir buena información para saber cómo podemos mejorar lo más rápido posible durante los próximos meses”.