Charles Leclerc abandonó el Gran Premio de Baréin cuando tenía, prácticamente, los 15 puntos en el bolsillo. Ferrari ya sabría de donde viene el fallo.
Antes de la carrera, la Federación Internacional de Automovilismo confirmó el cambio de centralita en el coche de Leclerc. El equipo aseguró que lo hizo por precaución, pero en carrera, esta parte de la unidad de potencia fue la que falló y dejó al monegasco sin puntos.
Según informa Motorsport.com, el componente que dio el falló ya no se podrá usar más adelante en la temporada, pero si el que fue sustituido. De todos modos, los ingenieros de Maranello siguen estudiando en profundidad la primera centralita. Es un alivio para la Scuderia, ya que se empezaba a hablar de una penalización para Leclerc en Yeda.
Igualmente, se llegó a la conclusión de que el fallo no fue humano. Tampoco a la hora de montar el coche ni en el momento de sustituir la batería y la centralita. El sistema eléctrico entró en fallo debido a que el mazo de cables era inadecuado para las tensiones que sometían los baches del circuito de Sakhir.
Son muchos los puntos que Ferrari debe analizar para Arabia Saudí. Otro de los capítulos más turbios del fin de semana fue ese alerón trasero de un solo anclaje que se rompió durante los primeros entrenamientos libres. Leclerc también perdió partes de su SF23 nada más iniciarse la sesión de clasificación.
Fred Vasseur mantiene la calma y centra sus esfuerzos en el apartado de la fiabilidad. “Si queremos mejorar, debemos tener una imagen clara de la situación y la fiabilidad no está al nivel que necesitamos”, dice el máximo dirigente de Ferrari en palabras que recoge PlanetF1.com.
El gran objetivo es vencer a Red Bull y todo pasa por mejorar el ritmo de carrera. “Somos rápidos en clasificación, pero no somos rápidos en carrera, y no es por poco. Así que creo que Red Bull encontró algo grande en alguna parte y tenemos que encontrarlo”, concluía Vasseur.
