George Russell ya sabe que se enfrentará a sanciones en la parrilla de salida tras el fallo de su unidad de potencia en Melbourne. Desde el equipo Mercedes, han revelado el alcance de los daños y no llegan buenas noticias para el joven británico.
Russell tuvo que abandonar en el tercer Gran Premio de la temporada después de que su W14 se incendiara. Tras una gran salida en la que logró adelantar a Max Verstappen, quién posteriormente ganaría la carrera, el británico logró mantener el liderato hasta la salida del coche de seguridad tras un accidente de Alexander Albon.
En ese momento, el equipo alemán decidió parar al #63 aprovechando que la prueba estaba neutralizada por el coche de seguridad. Sin embargo, una bandera roja posterior situó a Russell en séptima posición haciéndole perder la cabeza de carrera. Una vez que la carrera volvió a recuperar el ritmo de competición, el británico remontó hasta la cuarta posición, justo en el momento en el que tuvo el fallo de motor.
Tal y como ha podido saber la prensa, el equipo Mercedes ha confirmado ya los daños que ha sufrido el W14. Solamente han podido salvarse los componentes electrónicos de la unidad de potencia tras evaluar los daños mecánicos y llegar a la conclusión de que eran insalvables, puesto que se habían causado daños internos.
De este modo, tanto la escudería como el piloto son conocedores de la situación y saben que casi con total seguridad tendrán que recibir alguna sanción en la parrilla durante la temporada. Esto se debe a que actualmente, cada monoplaza cuenta con tres unidades disponibles para toda la temporada y en Mercedes ya han quemado un cartucho. Sin embargo, no son los únicos que han sufrido daños en el inicio de curso.
Red Bull, Ferrari y Aston Martin también han sufrido daños de fiabilidad y problemas mecánicos. Max Verstappen tuvo que comenzar 15º en Arabia Saudí tras un error en el eje de transmisión durante la jornada del sábado. Charles Leclerc, por su parte, se tuvo que retirar en Baréin, arrastrando una penalización de 10 puestos para el trazado de Jeddah. En Aston Martin, de momento el perjudicado es Lance Stroll, que tuvo que retirarse en Australia.
