Charles Leclerc lamenta no haber tenido un rebufo en su última vuelta de Q3 que le ha costado esa décima en Monza. El monegasco podría haber conseguido la Pole, pero esta ha caído de lado de un Carlos Sainz que se ha sentido muy cómodo todo el fin de semana. Alegría para Ferrari en casa, pero mañana es el día más importante.
Leclerc asegura que su objetivo era la Pole hoy, pero siendo realistas y viendo lo que ha sufrido, no está mal el tercer puesto. El monegasco habría preferido tener un rebufo en su último intento, pero ha salido sólo y no ha podido aprovechar esa décima. Era muy arriesgado, han ido a asegurar y Charles no ha sido capaz de repetir ese gran resultado a una vuelta de Bakú.
“Obviamente, quería ser el primero, pero viendo que Carlos está primero es genial. Ha hecho un gran trabajo todo el fin de semana. En clasificación he podido hacerlo bien, pero desafortunadamente en la Q3 no tenía ese rebufo y eso nos ha podido costar al menos una posición. Pero podemos estar contentos al menos por mi parte, porque hemos tenido muchas dificultades este fin de semana”, ha declarado Leclerc.
Leclerc remarca que el resultado de hoy es increíble para toda la afición de Ferrari y está muy contento por ellos. El objetivo para mañana será celebrar un doblete, pero lo tendrán realmente complicado, ya que Red Bull va muy bien en carrera. Evitar la décima victoria consecutiva de Max Verstappen se antoja altamente improbable, pero si hay algún lugar en el que se pueda soñar, ese es Monza y más en su caso.
“Lo que siento es increíble, con estos ‘tifosi’. Mañana intentaremos hacer un doblete con Carlos. Antes de la clasificación no pensaba estar cerca de la Pole. Él ha hecho un trabajo increíble este fin de semana, yo he tenido más problemas. En la carrera lo daremos todo”, ha finalizado.
