La Fórmula 1 sigue trabajando junto a la Federación Internacional de Automovilismo en el coche de 2026. Del siguiente monoplaza se espera que sea más pequeño, ligero y eficiente.
A partir del 2026, la máxima categoría del automovilismo sufrirá un cambio radical. La nueva unidad de potencia obtendrá el 50% de su propulsión de energía eléctrica. Para recuperar energía de la forma más rápida y fiable, el chasis también se ha modificado. La batería debería aportar 475 CV al rendimiento del motor.
Por eso, los coches deben ser más pequeños, ligeros y eficientes, algo que los aficionados llevan pidiendo años. Auto Motor und Sport ha publicado el que podría ser el diseño del próximo Fórmula 1. El ancho podría reducirse de los 200 a los 190 centímetros. El tamaño de las llantas volverá a ser de 18 pulgadas, lo que reduce el diámetro y el coche de los neumáticos en un 10%.
El halo y el cockpit se ensancharán, los deflectores del eje delanteros introducidos en 2022 cubrirán más las ruedas para reducir los vórtices de aire. La aerodinámica activa reducirá aún más la resistencia del aire en las rectas. Se está considerando un efecto DRS, pero el alerón trasero tendrá cuatro elementos en lugar de dos, una hoja principal y tres flaps. También hay consideraciones para hacer que el ala del haz o el borde del difusor sean móviles.
Al mismo tiempo, se está afinando el peso. Según los planes iniciales, el peso mínimo debería reducirse en 20 kilogramos. Actualmente se habla de 25 o incluso 30 kilogramos. La distancia entre ejes se ha reducido de 360 a 340 centímetros y será útil. Los coches más pequeños significan automáticamente menos masa.
El diseño de la suspensión también se está revisando para que sea más simple, algo que ayudaría a perder peso. Este primer concepto muestras placas finales del alerón delantero, que se inclinan para guiar el aire a través de las ruedas en el interior. También habrá unos bajos deflectores verticales que dirigen el flujo de aire al interior.
Para compensar la pérdida de carga aerodinámica debida a una elevación menos pronunciada del difusor trasero, los canales Venturi en la entrada delantera pueden ser más altos. También se pueden colocar dos aletas adicionales debajo del coche, a la izquierda y a la derecha, antes de que el difusor suba para dirigir el flujo más hacia el interior.
Gracias a esto, la FIA cree que los coches podrán seguirse más de cerca y no como está sucediendo con el concepto de 2022. Tampoco bajará la velocidad de los coches, ya que las últimas simulaciones muestran sólo un ligero aumento en los tiempos por vuelta.
