Dejando atrás la empresa familiar, Williams Racing quiere levantar cabeza con el proyecto de Dorilton Capital más que asentado. Esta pretemporada se ha dado como esperaban y en Grove están ilusionados con el FW44.
Nicholas Latifi y Alex Albon compartieron el monoplaza durante todas las jornadas de pruebas. La peor fue la mañana de Latifi el último día, ya que solo pudo completar 13 vueltas por un problema de frenos. Su compañero recuperó todo el tiempo perdido con 93 giros probando, además, las gomas intermedias. Su tiempo fue de 1:20.318.
“Si bien ha sido un trabajo arduo, el equipo ha trabajado bien en conjunto y, como resultado, hemos recopilado una gran cantidad de datos. Esto se utilizará para guiar tanto la próxima ronda de desarrollo del automóvil como los planes de ejecución para la prueba crucial en Baréin”, comentaba Dave Robson, jefe de rendimiento del equipo Williams.
Latifi se mostró satisfecho por todo el aprendizaje que han tenido con el FW44 durante estaba semana y ya piensa en lo que puede traer la semana de Baréin. “En general, creo que ha sido una pretemporada productiva en Barcelona. Hemos tenido algunos problemas menores aquí y allá, pero eso es parte del curso con un coche nuevo, ya que es un nuevo aprendizaje tanto para los pilotos como para el equipo”.
Por otro lado, Alex Albon está de regreso en la parrilla. Se hace raro verle con el logo de Mercedes, pero ahí está, con su segunda oportunidad fuera de Red Bull. “En general, el equipo ha tenido unos días muy exitosos en Barcelona; el coche ha sido fiable y lo hemos hecho bien para construir una muy buena base sobre la que trabajar”.
El tailandés espera que todo el equipo esté orgulloso de lo que han ido consiguiendo esta semana. “Todavía es temprano y no podemos leer mucho sobre los tiempos por vuelta, pero creo que deberíamos estar muy satisfechos con cómo han ido estas sesiones y estoy deseando volver a subirme al coche en Baréin”.
