El nombre de AlphaTauri desaparecerá de la parrilla tras 2023 y la estructura de Faenza ya piensa en nuevas denominaciones. Una de las que habría que tener en cuenta es la de Alfa Romeo, quienes acaban contrato con Sauber este año y ya han manifestado su intención de seguir en la Fórmula 1.
En primera instancia, la idea de Alfa Romeo era seguir con un equipo motorizado por Ferrari. La marca italiana romperá con Sauber tras 2023 a raíz de la asociación de estos últimos con Audi. Por ende, la única opción sobre la mesa es la de Haas y aunque ambas partes se han sentado a negociar, no parece que vaya a haber acuerdo. Otra opción para los italianos era aterrizar en el WEC, pero la Fórmula 1 tiene prioridad.
Aunque Alfa Romeo se quiera mantener ligada a Ferrari en Fórmula 1, la opción de AlphaTauri es demasiado tentadora a día de hoy. Los italianos quieren que su nombre siga en la parrilla y Red Bull busca un nuevo patrocinador para su segundo equipo que aporte una gran inyección económica a corto plazo.
AlphaTauri es el peor equipo de la parrilla en estos momentos y se avecina una gran reestructuración con la llegada de Laurent Mekies y Peter Bayer. Ha llegado la hora de un cambio radical y no será cuestión de meses. Los 100 millones que aporta Alfa Romeo por ser el patrocinador principal de Sauber pueden ayudar y mucho a enderezar el rumbo a los de Faenza.
Con la mirada puesta ya en el largo plazo y sobre todo en 2026, Red Bull ya dejó claro que sus colaboraciones con su segundo equipo serían más estrechas. Dependerán más de la marca de bebidas energéticas, quienes en menos de dos años y medio afrontan el mayor reto de su historia, que es la creación de un motor propio.
Las sensaciones que transmite Red Bull no parecen ser las ideales y el departamento está sufriendo más de lo esperado. Los de Milton Keynes han empezado a presionar para cambiar la normativa de 2026 en una reunión crucial de la Comisión de la Fórmula 1 que habrá este viernes en Silverstone. Allí se debatirán posibles modificaciones, las cuales están impulsadas en mayor medida por ellos.
Sin embargo, el dominio actual de Red Bull, las brillantes audiencias de la Fórmula 1 y la presencia de cinco fabricantes ya en 2026 deja entrever que todos irán en contra de los cambios. En los despachos siempre está la técnica de perjudicar a quien está ganando y ese es el caso de la marca de bebidas energéticas. Lo más probable es que haya ocho votos en contra de sus propuestas.
Por ende, la asociación con Alfa Romeo y la continuidad de un grupo tan poderoso como Stellantis (quienes no tienen más marcas vinculadas a la Fórmula 1) podría ayudar más a Red Bull en su departamento de motores. La marca de bebidas energéticas ya ha unido fuerzas con Ford, pero parece que no es suficiente.
Si bien el desarrollo de Ford está limitado a la parte eléctrica, la aportación de Alfa Romeo sería mayormente económica. Eso sí, los italianos podrían ayudar ya a corto plazo como asesores para el departamento de motores, la cual parece la mayor preocupación de Red Bull a día de hoy. Con el título de 2023 casi en el bolsillo y pensando ya en el coche de 2024, enderezar el rumbo de 2026 parece lo prioritario.
