La senda de Aston Martin en este 2023 parece ir en descenso tras las últimas carreras. A pesar de un gran inicio de temporada, tras las actualizaciones de Canadá algo pareció cambiar en el AMR23.
Austria y Gran Bretaña se presumían pistas complicadas para los ingleses por sus características. Pero en Hungría se llevaron una desagradable sorpresa al ver que tampoco consiguieron sacar rendimiento. Fernando Alonso, en declaraciones previas al GP de Bélgica, ha recalcado que lo sucedido en Budapest fue decepcionante, pero asumiendo el reto de llegar a un lugar como Spa.
“No tuvimos el fin de semana más fácil en Budapest y el noveno fue el máximo del domingo con tres puntos en total sumados para el equipo. Es un desafío muy diferente aquí, por la naturaleza de alta velocidad de este circuito. Siempre me ha gustado correr en Spa. Es un desafío que estamos esperando“, comentaba el asturiano.
Estar frente a un fin de semana con formato Sprint trae desbarajustes para Aston Martin. Por una parte, y según palabras de Alonso, necesitarían ‘varias sesiones para probar cosas’. En cambio, al ser, a priori, una pista que perjudica al AMR23, el formato y la climatología jugarán una baza a su favor.
“Es otro fin de semana de Sprint aquí, por lo que solo tenemos una sesión de práctica antes de la clasificación para optimizar todo, lo cual es una prueba para todos los equipos, especialmente con un tiempo mixto, esperando el pronóstico del tiempo”, comentó el bicampeón del mundo.
Aston Martin aún mantiene el tercer lugar en el Mundial de Constructores. Pero tanto Ferrari como McLaren son una seria amenaza para los de Silverstone. Las novedades que introducirán en Zandvoort serán cruciales para conocer el devenir de la temporada. En función del rendimiento que den, podremos ver o no a Aston de nuevo en la batalla por los podios.
