La Fórmula 1 lanzó hace un par de días la iniciativa ‘We Race As one’, con ella se quiere utilizar el deporte para rechazar el racismo y la desigualdad, así como promover un mundo más justo.
Los últimos acontecimientos vividos Estados Unidos y el alzamiento de voz de Lewis Hamilton están ayudando a la Fórmula 1 a tomar este tipo de iniciativas, para mejorar la sociedad. Ferrari ya introdujo un mensaje en las suspensiones durante su prueba en Mugello, pero lo mejor llegará en Austria.
La Fórmula 1 ha dado más detalles de esta nueva idea, a la cual ha destinado un total de un millón de dólares. Este dinero sale en su totalidad del bolsillo de Chase Carey, el CEO de la Fórmula 1.
“Reconocemos plenamente que la Fórmula 1 debe ser más inclusiva y diversa. Si bien establecemos nuestra estrategia el año pasado para mejorar la posición de nuestro deporte, necesitamos y queremos hacer más. Queremos asegurarnos de brindar a las personas de todos los orígenes las mejores oportunidades para trabajar en la Fórmula 1, independientemente de su género, etnia, orientación sexual o habilidades físicas”, decía Carey.
“Estamos dando el paso inicial de crear una base para apoyar oportunidades educativas y de empleo clave en la Fórmula 1 que brindarán a los talentos poco representados la oportunidad de trabajar en este increíble deporte y desarrollar una carrera emocionante”, finalizaba.
La FIA busca promover un flujo de conductores diversos y eliminar las barreras de entradas que ya existen desde el karting. El Grupo de trabajo se centrará específicamente en identificar las oportunidades de empleo y educación para los grupos subrepresentados en la Fórmula 1, incluidas las carreras STEM, y las acciones necesarias para abordar estos hallazgos.
En el comunicado que lanza hoy la F1 se puede leer: “Creemos que, como deporte verdaderamente internacional, podemos marcar la diferencia utilizando nuestra voz y determinación para abordar estos problemas vitales”.
