Lando Norris recordará Sochi de una forma muy negativa en el futuro. No quiso entrar a montar neumáticos intermedios por miedo a perder la victoria. Se quedó sin ella porque la lluvia incrementó, los compuestos de seco no eran los apropiados para la ocasión y acabó fuera de pista.
Daniel Ricciardo consiguió la victoria en Monza y Norris se vio ante la oportunidad de su vida en Rusia. Las ganas le pudieron. McLaren tampoco actuó bien y debería haber insistido más a su piloto, tras la carrera también se echaron la culpa. Tanto Norris como el equipo han trabajado durante tres días en la fábrica para estudiar esa serie de errores que les privó de la victoria.
“Por supuesto, he aprendido muchas cosas: cosas por mí mismo, qué podría hacer mejor la próxima vez, si volvemos a estar exactamente en la misma situación y cómo puedo tomar mejores decisiones”, desvelaba Norris en una charla con Motorsport.com. “Pero también con el equipo: en cómo podemos comunicarnos mejor. Cómo podemos hablar, para que el equipo también me dé más información, para poder tomar decisiones”, continuaba sobre esas conversaciones de radio, que en Rusia fueron muy tensas.
Norris ha explicado que McLaren no se ha dejado nada en ese análisis, incluidas sesiones de simulación. “Revisamos todo, toda la carrera: incluso desde la primera vuelta hasta el final. Pero, por supuesto, lo que es más importante, las últimas 10 vueltas. Pasamos dos días en el simulador y un día revisando todo con la comunicación y cómo hablamos entre nosotros para intentar hacer un mejor trabajo la próxima vez”.
Gracias a estos días de trabajo, Norris espera no volver a pasar por una situación simular. “No voy a decir necesariamente lo que he aprendido, pero he aprendido mucho y el equipo ha aprendido mucho. No es una garantía, pero con suerte lo haremos mejor la próxima vez”. El británico espera que en circuitos como Austin o Interlagos tengan opciones parecidas a las de estas últimas dos carreras.
