En la rueda de prensa de Australia, Charles Leclerc ha declarado que no cree que haya ningún milagro de Ferrari este fin de semana. El monegasco que haría su primer Grand Chelem en Australia la temporada pasada, no está pasando por su mejor momento en este arranque de 2023.
Los problemas de fiabilidad en el carrera de Baréin, que más tarde acarrearían una sanción de diez posiciones en Arabia Saudí, no son el comienzo soñado de Leclerc esta temporada. Pese a esto, demostró un gran ritmo, que podía haberle dado el podio en una hipotética lucha con Fernando y una gran clasificación en Yeda con un segundo puesto.
El escenario no es igual al de la temporada pasada en Australia. En unas declaraciones recogidas por Malay Mail, Leclerc decía que están en un punto diferente al de 2022. “Tengo buenos recuerdos pero mirando a este año no estamos en la misma situación. Estamos trabajando muy duro para volver al frente”. Añadió que no espera milagros en Ferrari este fin de semana, pero que hay un descanso de tres semanas hasta Bakú en las que pueden traer grandes mejoras.
Ferrari es el equipo grande que menos rendimiento muestra este inicio de temporada, siendo superado por Aston Martin e incluso Mercedes. Leclerc ha hablado de las ventajas y desventajas del SF-75. “Hemos sido rápidos en clasificación desde el inicio. Tenemos que concentrarnos en la carrera, es donde el coche más flojea”. Su predicción es que serán muy competitivos en clasificación pero sufrirán los mismos problemas de ritmo y degradación de nuevo.
Respecto a su compañero Carlos Sainz, Leclerc le ha superado dos veces en clasificación, pero perdió en las dos carreras por fiabilidad. En este inicio de temporada, el monegasco vuelve a demostrar estar por encima del español como en el inicio de 2022.
Ambos tendrán que trabajar juntos para revertir la situación que vive Ferrari y superar a Mercedes y Aston Martin. Acercarse a Red Bull parece imposible, pero el año pasado la escudería austriaca demostró que se puede remontar a lo largo de la temporada.
