Horas bajas para Vanwall Racing, equipo operado por ByKolles, en el Campeonato de Resistencia. Primero fue el feo a Jacques Villneuve antes de Le Mans y ahora Tom Dillmann coge la puerta de salida.
Después de cinco años dentro de la estructura ByKolles, Dillmann ha tomado la decisión de abandonar el equipo después de las 24 Horas de Le Mans. El Vandervell 680 LMH no pudo terminar la carrera por un fallo en el motor. Este equipo nunca ha cruzado la meta en el circuito de La Sarthe.
“He corrido en muchas carreras con el equipo y sentí que era hora de probar algo diferente. Obviamente es un riesgo irme, ya que no tengo nada más en este momento, pero sentí que tenía que hacerlo para intentarlo y conseguir un lugar en otro lugar”, confesaba Dillmann en exclusiva para Motorsport.com.
Dillmann espera encontrar el proyecto con el que luchar por mejores posiciones. “Creo que he hecho un buen trabajo para un equipo que está luchando en la categoría principal y quiero redoblar mis esfuerzos para estar en esta posición. No quiero convertirme en una estrella, pero creo que puedo ser un gran activo para un equipo. He demostrado que soy fiable en todas las condiciones y que se puede contar conmigo”.
Por último, el piloto asegura que “nunca hablaría mal del equipo”, ya que con ellos debutó en Le Mans en 2014. “Le deseo lo mejor. Es solo que sentí la necesidad de buscar una oportunidad en la que pudiera luchar por mejores resultados en el corto plazo”, cerraba Dillmann.
El nuevo miembro de Vanwall Racing para las 6 Horas de Monza del próximo mes será João Paulo De Oliveira. Tiene una gran experiencia en el Super GT en Japón y ya pasó tiempo en ByKolles Racing en el pasado y participó en las pruebas de desarrollo del actual Hypercar. Sus compañeros serán Esteban Guerrieri, a quien no se le ha ocurrido marcharse de momento, y Tristan Vautier.
