Carlos Sainz ha firmado un octavo lugar en Hungría en una carrera en la que Ferrari no ha tenido el ritmo que le hubiese gustado. El español ha minimizado daños con una gran salida, en la que ha ganado cinco posiciones. A partir de ahí, al igual que el ritmo del SF-23, ha ido a menos y ha acabado sumando cuatro puntos.
Sainz ya ve a McLaren por delante de Ferrari, dado que en dos circuitos, ya les han ganado la partida por completo y eran muy diferentes entre sí. Algunos rivales han evolucionado muy bien y ellos siguen en esa cuarta posición en carrera. Les está costando mejorar y deja claro que eso es lo más importante y no el undercut que han decidido desde el muro.
“No hay mucho que decir. Charles ha tenido una parada complicada y luego está claro que el equipo ha decidido cambiar las posiciones de los coches, igual para compensar o no sé. Una pena. Lo que nos tiene que preocupar es el segundo y medio que nos metían los Mercedes al final de cada tanda larga”, ha reconocido Sainz.
“Lleva siendo la tónica de la temporada y el por qué no conseguimos resolverlo. Ya está claro que los McLaren están delante nuestro. Son dos o tres circuitos y lo único que hay que hacer es centrarnos en nosotros, mejorar porque nuestros rivales están haciendo pasos adelante muy grandes”.
Sainz revela que sus sensaciones con el medio, al contrario que ayer, han sido bastante buenas. Sin embargo, el neumático duro, sobre todo en el tramo final, les ha hecho perder mucho rendimiento en comparación con Mercedes. No ha podido aguantar detrás a George Russell y se ha tenido que conformar con ser octavo.
“No ha ido mal con los medios. Las primeras 15 vueltas han ido como quería. Buena salida, al ataque y un buen primer stint siendo uno de los únicos coches que ha alargado los blandos. Ha sido poner la dura y tener que hacer tandas más largas que al final nos han comprometido. Siempre nos pasa, nos vamos a un neumático más duro y las tandas se convierten en stints de más de 20 vueltas, ahí sufrimos“, ha finalizado.
