El equipo Ferrari ha explicado recientemente el por qué de la descalificación de Leclerc en el GP de Austin. Charles Leclerc terminó el Gran Premio en sexta posición, pero el monoplaza italiano terminó descalificado tras la verificación de la Federación Internacional de Automovilismo.
El Gran Premio de los Estados Unidos en el Circuito de las Américas terminó con sorpresas e intervención de la Federación Internacional de Automovilismo. El equipo Ferrari vio la bandera a cuadros en cuarta y sexta posición con Carlos Sainz y Leclerc, respectivamente. Sin embargo, el monegasco fue finalmente descalificado por un hecho que ya ha explicado la Scudería.
Las verificaciones rutinarias tras la carrera del domingo fueron las culpables de que Charles Leclerc —y también Lewis Hamilton— terminase descalificado. El motivo fue un excesivo desgaste de la plancha inferior del monoplaza, que roza con el asfalto. “El reglamento técnico establece claramente que, al final de la carrera, hay unas medidas que deben respetarse para la parte inferior del coche, que sirve para proteger al monoplaza en contacto con el asfalto”, explicó Diego Loverno, Director Deportivo de Ferrari, según recoge Motorsport.com.
“En las verificaciones posteriores a la carrera, nuestro coche estaba unas décimas por debajo del umbral mínimo, pero lo suficiente como para que los comisarios considerasen ilegal nuestra posición. El reglamento impone la descalificación para este caso”, añadió posteriormente.
El formato sprint del fin de semana de Austin, tampoco ayudó a que los equipos pudieran verificar todos los datos de la pista. Además, una gran parte de la parrilla mostró su continuo descontento con el estado del asfalto. Numerosos baches en las curvas rápidas sorprendieron a equipos y pilotos.
El simple hecho de no disponer de tiempo suficiente para analizar en profundidad los monoplazas y los datos obtenidos en la jornada de viernes, supuso un despiste grave en algunos equipos. Ciertas escuadras de la parrilla pensaron que habían elevado suficientemente sus coches y sin embargo no era así. “El fin de semana Sprint es muy especial. Tienes muy poco tiempo para preparar el coche, sólo una sesión, porque luego vas directamente al parque cerrado. A partir de ahí ya no puedes tocar el coche”, comentaba Loverno.
“Sabíamos que sería difícil, por eso levantamos el coche durante la FP1. Desde nuestro punto de vista debería haber ido bien”. Pese a que Ferrari consideraba apto su monoplaza, la FIA lo descartó una vez terminada la carrera y no lo consideró legal. “No hay mucho que pudiéramos haber hecho. Volviendo atrás, podríamos haber elevado el coche aún más, pero habríamos perdido rendimiento. Pero siempre estamos aquí para intentar optimizar nuestro rendimiento. Como efecto secundario terminamos en el podio con Carlos, ganando algunos puntos sobre Mercedes y McLaren”, sentenció Diego Loverno