El RB20 seguirá siendo uno de los mejores coches de la parrilla, pero el límite presupuestario ha supuesto un problema para las escuderías de la temporada 2024.
Este límite que han decidido poner, para que haya más igualdad en la competición, por ahora está dando algún que otro problema. Una de las escuderías que se encuentra con este dilema es Red Bull Racing. Según informa RacingNews365.com. Adrian Newey ha declarado que la escudería ha tenido que tomar una decisión con el RB2O para poder seguir manteniendo a los monoplazas rivales por detrás.
Por otro lado, ha expuesto el problema con el que cuenta la escudería en cuanto a seguir con el diseño del monoplaza o empezar con un diseño desde cero. Además, Newey ha dejado claro en el propio podcast de la escudería (Talking Bull) lo siguiente. “Es en gran medida una tercera evolución del coche de 2022. El coche del año pasado fue una evolución del coche de 2022. Lo que no sabemos es si la tercera evolución será demasiado conservadora, mientras que otros han hecho algo diferente. Simplemente no lo sabemos”, ha declarado el ingeniero en el podcast.
Por otro lado, admite que se hacen varias preguntas, como mirar lo que hace el resto de los equipos o seguir con su propia hoja de ruta como han hecho en el pasado. Tampoco ayuda el límite presupuestario. “Somos limitados en recursos, por lo que no podemos hacer todo, no podemos mirar todas las vías, por lo que hemos adoptado el enfoque de desarrollar lo que tenemos, y esperamos que esa sea la decisión prudente y correcta”, declaró
La pregunta es ¿qué pasará con Newey? Obviamente, para la escudería de Milton Keynes si el ingeniero británico dejara de lado la F1 sería un golpe bajo y, además, el sueldo de Newey entra dentro del límite presupuestario. Por otro lado, la escudería está barajando la idea de pasar a Newey al proyecto RB17 a tiempo completo. Si esto pasase, el ingeniero no podría trabajar en los monoplazas de F1.
