Antes de las vacaciones de Navidad, Carlos Sainz se pasó un día por Maranello para mantener las primeras reuniones con sus mecánicos e ingenieros, además de hacerse el asiento para ese SF71H que probará este mes de enero, el coche de Ferrari para la temporada 2018.
Para Sainz, la temporada ya ha comenzado. Los test en pista son limitados, tan solo habrá tres antes de llegar al Gran Premio de Baréin en marzo. Todo el tiempo que pase en el simulador será más importante que nunca, aunque no es realmente lo que se siente dentro de un coche real y en pista. Ferrari tiene que dar un gran salto para mejorar sus resultados de la temporada pasada, el ex de McLaren está tranquilo porque ya ha sido testigo del trabajo de los italianos.
En un vídeo que ha compartido Sainz por redes sociales, decía: “Por fin estamos aquí, ya empezando a trabajar seriamente con todos los ingenieros y el equipo”. Aseguró haber tenido un largo trabajo de conversaciones con mucha gente nueva: “Estoy conociendo muchas caras y nombres nuevos. Me llevará tiempo aprenderme todos ellos, pero estoy en ello. Acabo de tener unas seis horas y media de reuniones”.
Como se comentaba, Ferrari tiene que poner mucho esfuerzo para mejorar sus resultados de 2020. Aunque el objetivo este en 2022, con el cambio de reglamento, los de Maranello preparan una nueva unidad de potencia y aseguran que los pequeños cambios aerodinámicos les pueden beneficiar: “Anima mucho ver como todos estamos trabajando para este año”, decía Sainz al respecto.
Para acabar, el madrileño confirmó que comenzó ya su trabajo en el simulador para así dar las primeras impresiones a su equipo: “Hoy me metí en el simulador y comencé a dar mi feedback y a trabajar duro para esta temporada. Muchas gracias por el apoyo y nos vemos pronto”.