Antes de la carrera, Max Verstappen recibió un golpe bajo con una sanción de cinco puestos por ignorar banderas amarillas. Estas las provocó Pierre Gasly al romper su alerón delantero y posterior neumático al atacar mucho el piano de la salida de la curva quince.
Esto hizo que Verstappen tomara la salida en Losail desde el séptimo lugar. En la misma se puso cuarto y luego tan solo tuvo que superar a Gasly y Fernando Alonso, lo hizo en pocas vueltas. Tras un primer stint manejando los neumáticos, en el segundo se hartó de seguir conservando y pidió permiso para atacar, aunque también sabiendo que no iba a conseguir la victoria. Finalmente 19 puntos que le mantienen líder, pero con solo ocho puntos de ventaja a falta de tres carreras.
“Obviamente nuestra posición de salida ha sido comprometida, pero hemos salido muy bien. Hemos podido llegar al segundo puesto rapidamente y conseguir esa vuelta rápida, es algo que me gusta”, comentaba Max al bajarse de su monoplaza en una entrevista con la Fórmula 1, la cual llevaba Jenson Button, campeón del Mundo en 2009. “Simplemente no tuvimos el ritmo este fin de semana para igualarlos. Intenté seguirlo y sí, al final estuvo bien”.
Hay 52 puntos en juego -contando al vuelta rápida- y tan solo ocho de diferencia entre los dos contendientes al título. Verstappen pronostica un final apasionante, pero está en buena forma. “Por supuesto, será difícil hasta el final, pero eso hace que sea emocionante. Me siente bien y va a ser una batalla apretada”.
Es la primera vez que la Fórmula 1 corre en Losail y fue preguntado por cómo había sentido el trazado. “Esta pista es muy divertida en lo que respecta al piloto, rápida y la degradación ha aguantado bien, es guay”, concluía el líder del Mundial.
