El sueño estaba cerca, la victoria en las 500 Millas de Indianápolis se tocaba con la yema de los dedos saliendo desde la Pole y aguantando al pelotón en los primeros stint, pero un infortunio la arruinó todo.
Rinus VeeKay y Alex Palou están destinados a encontrarse en los óvales y, por el momento, no sale bien. Ya sucedió en Texas durante la temporada 2020, ambos se encontraron en pista cuando el de Ed Carpenter Racing salía de boxes y acabó en accidente. Esta vez ha sido dentro del Pit-Lane, cuando el neerlandés salía de su caja derrapando como nunca.
No había necesidad de arriesgar de esa manera, pero perdió el control del coche e impacto con Palou, que salía de su caja, y golpeó con el muro. Cayó fuera del TOP 20, pero la estrategia, las bandearas amarillas y accidentes jugaron a su favor para volver al cuarto lugar. Es para estar contentos, pero sale de Indianápolis con la sensación de que todo podría haber salido mejor.
Palou se va de las 500 Millas sabiendo que lo han intentado todo. “Así ha sido. Estábamos muy bien al principio y un contacto en Pti-Lane que no podíamos hacer nada nos ha dejado fuera de carrera. Nada que no pudiéramos haber hecho diferente y contento de haber recuperado algunos puestos y llegar un TOP 5 a casa”, comentaba para la página web IndyCar Al Día.
Mientras hacía estas declaraciones, VeeKay se acercaba a Palou para pedir perdón, pero la cara del barcelonés lo decía todo. Además, añadió lo siguiente: “No hemos hecho nada diferente, podríamos haber seguido una estrategia como la de pato, pero seguimos a los líderes, creo que salió muy bien y como te digo, nos faltan 40 o 50 vueltas para intentar luchar por la victoria”.
