La carrera de Zandvoort nos dejó uno de los grandes premios más locos del año. A lo largo de la carrera, los equipos optaron por diversas estrategias para intentar conseguir el resultado más optimo en condiciones mixtas. El jefe de equipo de Mercedes, Toto Wolf, calificó, después de la carrera, la actuación del equipo como “absolutamente deficiente”.
Como recoge el medio Autosport.com, Wolff admite que mantuvieron a los pilotos demasiado tiempo bajo lluvia con neumáticos de seco. Esto hizo que Russell perdiera cualquier ventaja de salir tercero y que Hamilton no pudiese remontar. “Nos equivocamos por completo”, fueron las palabras exactas del austriaco.
Cuando se le preguntó acerca de los fallos, Wolff fue contundente. “Lo revisaremos a fondo. La situación nunca es de una sola persona o de un departamento. Son las comunicaciones entre el piloto, el muro de boxes, la estrategia, el clima y luego todos nosotros tomando decisiones”. El motivo principal de dejar a ambos monoplazas fuera en la lluvia fue que el equipo la “subestimó”, pensaron que acabaría pronto y que no era necesario parar.
A pesar del mal resultado en Mercedes son optimistas. El ritmo de carrera era similar al de Max y superior al Ferrari, lo que hacía indicar que se podía optar al podio con Russell. “Al final vimos con los intermedios que George tenía el ritmo de Max y Lewis era muy fuerte detrás de Sainz. Podríamos haber estado mucho más adelante”, decía Wolff acerca del rendimiento real del coche.
Tras el resultado de Zandvoort, Aston Martin le recorta puntos en el Mundial. Para la cita del siguiente fin de semana en Monza, el equipo alemán ve como llega con 40 puntos de ventaja respecto a su rival directo. Situación que mantiene al equipo muy atento a posibles carreras del estilo a esta última.
