Fernando Alonso: un piloto de época

Fernando Alonso en el podio del GP de Brasil 2023 - Fuente: Getty Images

Quisiera arrancar esta lectura con una corta, pero precisa frase, del célebre pintor malagueño Pablo Picasso. Dice así: “Cuando me dicen que soy demasiado viejo para hacer una cosa, procuro hacerla enseguida”. Y es que hay quienes aún dudan del talento innato de Fernando Alonso a sus 42 años. Muchos de ellos culpan a su edad, otros a sus decisiones deportivas y varios a su carácter, pero la realidad es bien distinta.

La temporada 2023 del asturiano está siendo fabulosa. Sinceramente, ninguno esperábamos ver tan arriba a Aston Martin este año. Hace justo 12 meses le dices a cualquiera que el bicampeón del mundo estaría, a falta de dos rondas, con ocho podios y cuarto en la general y se reiría a carcajadas. Y es que tanto los de Silverstone como ‘Magic‘ nos han hecho soñar durante estos intensos meses.

Fernando Alonso durante el GP de Brasil 2023 – Fuente: Getty Images

El tigre que se quitó la astilla de su pata

Han sido muchas las temporadas de espera para volver a ver a Alonso en un coche competitivo. La victoria número 32 del asturiano fue hace ya más de 10 años. En aquel Gran Premio de España de 2013, Fernando ondeó la bandera española con orgullo por el Circuit y la agitó con fuerza en la calle de boxes. No lo sabíamos, pero sería el inicio de una época llena de retiros y sinsabores —primero en Ferrari, después en McLaren— en las que acabar en los puntos parecía un milagro más que una costumbre.

Tanto fue así que el propio Alonso decidió dar un paso atrás en 2018 para volver con las pilas cargadas para 2021. Aún así, vivió un tormento en la que fue su casa antaño: Alpine. Todos perdimos la ilusión, sabíamos que uno de los mayores talentos que había pasado por la categoría se iría sin pena ni gloria, aunque dejando un hondo agujero en el corazón de aquellos que le vimos sufrir sin merecerlo.

No pudimos estar más equivocados, afortunadamente. El Gran Premio de Baréin 2023 vio a un “tigre que se había quitado la astilla de su pata”, como dijo Antonio Lobato en aquella oportunidad. El fiero animal, con más hambre que canas, volvió a su territorio de caza favorito.

Fernando Alonso y Lewis Hamilton en el GP de Bahréin 2023 – Fuente: Getty Images

La superioridad frente a Stroll

A priori muchos podrían decir que los buenos resultados de Alonso se deben en buena porción a su monoplaza, el AMR23. Y en parte tienen razón. La quinta plaza del Mundial de Constructores nos sabe a poco. Lo que no muchos parecen ver es que el compañero de Fernando, Lance Stroll, está siendo vapuleado como pocas veces hemos visto en la categoría. Los 198 puntos del asturiano distan mucho de la casi irrisoria cifra de 63 conseguidos por el canadiense.

Stroll no es manco precisamente. Sí, tampoco es de los mejores pilotos en la parrilla actual, pero ha demostrado en múltiples ocasiones que puede pelear contra corredores del nivel de Sergio Pérez o Sebastian Vettel. Lance tiene asegurado su hueco en F1 gracias a su padre, Lawrence Stroll. Si esto no fuera así, si Lawrence no tuviese el control de Aston Martin, probablemente estaríamos ante la última temporada del canadiense en F1.

Fernando Alonso y Lance Stroll previos al GP de Brasil 2023 – Fuente: Getty Images

Interlagos: una nueva píldora de magia

Me vais a permitir que dedique este apartado a la que, para mí y para muchos, es la mayor muestra de inteligencia, frialdad, valor y coraje que se ha visto recientemente en el Gran Circo. La defensa de Fernando Alonso en las últimas 20 vueltas del Gran Premio de Brasil fue legendaria. El asturiano consiguió mantener detrás a Sergio Pérez en un circuito ‘fácil’ para adelantar, con un coche inferior y durante más de una cuarta parte de la carrera pegado a su alerón trasero.

Checo pasó a falta de dos vueltas para el final. Pero Fernando fulminó al mexicano en el último giro, antes de llegar a la curva cuatro, en una clase magistral de cómo hacer un contraataque. La pelea fue dura pero limpia, y muy ajustada. Lo mejor de todo es que, tras la carrera, nos enteramos por la radio de Alonso de que aquella lucha sin cuartel estaba siendo controlada por el de Aston.

La reacción del mundo lo dijo todo. La admiración, los aplausos y las alabanzas a nivel global supieron a mucho más que los 15 puntos de la tercera posición que defendió a capa y espada.

Fernando Alonso, Aston Martin F1 AMR23 during the F1 Grand Prix of Brazil at Autodromo Jose Carlos Pace on November 05, 2023 in Sao Paulo, Brazil.
Fernando Alonso y Sergio Pérez en el GP de Brasil 2023 – Fuente: Getty Images

Una historia que merece un final feliz

La gracia de un mago es que, tras su actuación, nadie sepa de dónde se ha sacado el truco. A sus 42 años, tenemos la suerte de poder decir que seguimos sin poder dar una explicación mínimamente razonable a lo que hace semana tras semana Fernando Alonso. Estamos ante un piloto que merece más de lo que ha obtenido. Su palmarés es envidiado por muchos, pero escaso en relación a su calidad. Nadie duda, a pesar de todo, que es uno de los mejores de la historia del deporte.

Y es que precisamente su historia va muy ligada a la de un joven madrileño que se unió a la montaña de la F1 allá por 2015 y que ahora brilla con luz propia en la escudería más mítica de todos los tiempos: hablamos de Carlos Sainz. Sin Fernando, sin su legado, sin su leyenda, probablemente estaríamos faltos de españoles en la categoría.

La 33 no es solamente una victoria o un objetivo, es también un legado. Millones de aficionados lucen camisetas con su nombre bordado por todo el mundo. España entera se vuelve loca cada vez que nos lo muestran en pantalla. Sí, quizás no le veamos lograr su tercer campeonato o ni siquiera su trigésimo tercer triunfo. Pero a las leyendas del deporte se les cita con letras doradas en la historia, y Fernando Alonso Díaz lleva tiempo perteneciendo a ese club.