La catalana consigue la decimoquinta posición en la general de la categoría Ultimate, es tercera de la categoría 4×2, ha hecho un Dakar para enmarcar y pide paso, simplemente, Laia Sanz.
La piloto de Astara Team puede presumir de haber completado los 14 Dakar en los que ha participado, los tres últimos en coche. Su paso a las cuatro ruedas se dio en 2022 y pocos esperaban que iba a rendir como lo está haciendo. Después de ganar todo en motos se marcaba otro reto, lo ha superado con creces y, por supuesto, quiere más.
Durante esta edición, Sanz ha mejorado su posición en una etapa, decimocuarta, pero su mejor resultado está en la general, decimoquinta. “Estoy muy contenta, pero no tanto por el resultado, que es muy bueno y que, por supuesto, hubiese firmado. Pero sobre todo por la sensación de saber que, aunque obviamente nos falta aprendizaje y tiempo en el coche, podemos estar más delante todavía, por supuesto”, comentaba en unas declaraciones que recoge AS.com.
😁 Happy @LaiaSanz_!
It’s the 14th consecutive year that Laia Sanz completes the Dakar (since 2011)!
🏍 From 2011 to 2021 on a bike (with 11 victories in the women’s category) and since 2022 in a car. 🚗#Dakar2024 pic.twitter.com/GcYbjLzCcU— DAKAR RALLY (@dakar) January 19, 2024
Sanz está pidiendo paso a un T1+, que ya sería competir con los grandes, aunque a algunos ha conseguido superar en esta edición con un coche de la categoría T1.2. “El año pasado nos quedamos con ese sabor de boca amargo de no poder hacer etapas limpias, pero este año creo que hemos podido demostrar que podemos estar delante. Es verdad que en la segunda semana no hemos tenido muchos días limpios, pero igualmente súper contentos. El Dakar también es sobreponerse a las dificultades, y todo el equipo ha hecho un gran trabajo”.
La catalana se queda con una cosa de este Dakar 2024, su cuarta posición a los 50 kilómetros de la décima etapa, pero un pinchazo lo fastidió todo. “Ahí si me sorprendí. Me hizo ilusión ver mi nombre ahí, aunque fuese durante 50 kilómetros, pero también es importante que nos lo creamos y ver que podemos estar ahí”. Y sobre una posible llamada, dice: “Será difícil, pero vamos a intentarlo. Hay que luchar, que creer y que seguir así”.